Por Santiago Ospital – voz.us

Un grito de “No es justo! Duele muchísimo” y un paso al costado en el segundo 46. Esa es la conclusión de la controvertida pelea entre la italiana Angela Carini y la argelina Imane Khelif, una boxeadora que no superó las pruebas de género.

La pelea en categoría femenina, peso welter, había despertado polémica porque el representante de Argelia había recibido la venia de los organizadores de los Juegos Olímpicos a pesar de no haber superado las pruebas de elegibilidad de género, por sus elevados niveles de testosterona.

A Khelif, la Asociación Internacional de Boxeo le había negado la participación en el Campeonato Mundial femenino el año pasado tras detectarle “cromosomas XY”. 

“Si paré, lo hice por mi familia”

Tras el combate, Carini evitó pronunciarse sobre la polémica -“¿fue un combate irregular? No soy nadie para juzgarlo”- y aseguró que se iba con la cabeza alta, en palabras recogidas por el periódico italiano Corriere della Sera.

Sentí golpes muy fuertes, recibí golpes, soy una luchadora y mi selección lo sabe, soy alguien que aún ante el dolor nunca se detiene”, aseguró también antes de añadir: “Si paré, lo hice sólo por mi familia“.

“Habría sido más fácil no presentarse, porque toda Italia llevaba días pidiéndole que no luchara“, dijo su entrenador, Emanuele Renzini. “Pero Angela estaba motivada y quería hacerlo. Por supuesto, en el sorteo, cuando conoció a su rival, dijo ‘esto no es justo‘. Pero hoy aquí (en el abandono) no ha habido premeditación”.  

Indignación alrededor del mundo

El resultado del combate volvió a avivar las críticas por la participación de Khelif. 

La primera ministra, Giorgia Meloni, publicó un video en conversación con periodistas criticando el cambio de reglamento que permitió la participación de personas con más testosterona. Los acusó, asimismo, de discriminar a las mujeres al tratar de no discriminar a otros.

En la grabación, Meloni se entera en directo de la retirada de la boxeadora: “Lo lamento aún más“.

La autora JK Rowling también opinó, con una publicación en Twitter:

“Mira esto (todo el hilo) y luego explica por qué te parece bien que un hombre pegue a una mujer en público para entretenerte. Esto no es deporte. Desde el tramposo bully vestido de rojo hasta los organizadores que permitieron que esto sucediera, se trata de hombres que se regodean en su poder sobre las mujeres.”

La exdeportista y activista Riley Gaines también sostuvo que la pelea demostraba que “los hombres no pertenecen al deporte femenino”; comentario al que Elon Musk respondió: “Absolutamente”.

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