Traducido de trendingpolitics.com por TierraPura.org
Quienquiera que esté escribiendo el libreto de Joe Biden no parece tener un conocimiento práctico de por qué los estadounidenses celebran el 4 de julio, o como se conoce de otro modo, el Día de la Independencia .
El miércoles, el presidente número 46 de la nación reiteró su cansadora amenaza: si la gente no va al sitio de vacunación local y se arremanga, no podrá celebrar el 4 de julio. Incluso para reunirnos en “pequeñas reuniones” para conmemorar el día en que nuestros antepasados se liberaron de la tiranía de un rey .
El impulso de vacunación masiva de Biden se ha quedado atascado en el barro ahora que aquellos que estaban ansiosos por recibir “la vacuna” lo han hecho. Eso deja a decenas de millones de estadounidenses que, comprensiblemente, desconfían de que se les inyecte vacunas que se apresuraron a distribuir bajo la aprobación de uso de emergencia. Sin los años estándar de ensayos clínicos y en animales que muestran seguridad y eficacia a largo plazo.
El mes pasado, Biden colgó la zanahoria que generosamente permitiría celebraciones reducidas, mientras blandía el palo de que podía cambiar de opinión si no se obedecían sus órdenes. El Dr. Anthony S. Fauci también sugirió que habría prohibiciones en la preciada festividad estadounidense si no se vacunara un número suficiente.
Con el suministro de vacunas ahora superando la demanda en muchas áreas según los informes , Biden sacudió ese palo en los estadounidenses.
Según Biden, “el 11 de marzo, describí una visión de cómo podría verse Estados Unidos para el 4 de julio, un Estados Unidos que estaba mucho más cerca de la vida normal que dejamos atrás hace más de un año”.
Continuó: “ Para celebrar nuestra independencia de este virus el 4 de julio con familiares y amigos en pequeños grupos, todavía tenemos más por hacer en los meses de mayo y junio. Todos necesitamos enmascararnos hasta que disminuya el número de casos, hasta que todos tengan la oportunidad de vacunarse. “
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Al igual que Fauci y los CDC, Biden lanzó un mensaje contradictorio al insistir en que los estadounidenses se “enmascaren” aunque hayan recibido la vacuna. Esta orden no es precisamente un incentivo para vacunarse en absoluto. Este comentario parece indicar que las máscaras, que han llegado a ser el símbolo no oficial del autoritario partido demócrata, no van a desaparecer NUNCA.
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El senador Rand Paul lo expresó mejor cuando se trata de la presión de Biden para vacunar a todos los estadounidenses: “Si quieren que más gente se vacune, Joe Biden debería ir a la televisión nacional, quitarse la máscara y quemarla… y decir: ‘Me he vacunado y ahora estoy salvado de esta plaga’. Si os vacunáis, también podéis estar a salvo'”, dijo el republicano de Kentucky.
El líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, respondió: “Fue un consejo para un universo alternativo. Es posible que el presidente y sus asesores deban hablar más. Los estadounidenses ya se están reuniendo en pequeños grupos al aire libre en estados azules y estados rojos, en pueblos pequeños y grandes ciudades. El país no está bloqueado esperando el 4 de julio ”.
El senador republicano de Texas, John Cornyn, también intervino; ” Si todas las personas que lo deseen en Estados Unidos se vacunan contra el # COVID19 para mayo, como ha dicho POTUS, ¿por qué dejar nuestras vidas en espera hasta el 4 de julio?”
La toma de rehenes de Biden es arrogante, obscena y simplemente antiestadounidense. Los estados rojos se han reabierto con éxito, se han revocado los mandatos de máscaras y la gente sigue con sus vidas sin esperar el permiso de Washington. Estado rojo o estado azul, los patriotas celebrarán el 4 de julio sin importar lo que amenacen Biden y Fauci.
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