Amado Boudou, exvicepresidente kirchnerista de Argentina, acusado y condenado a cinco años y 10 meses de prisión por intentar quedarse con el 75 % de las acciones de la imprenta Ciccone, que fabricaba papel moneda, ha logrado un insólito beneficio de la justicia argentina.

La resolución ha sido dictada por el juez Daniel Obligado en un fallo de 21 páginas donde consideró el beneficio que obtienen los presos que logran estudiar en la cárcel. Pese a la opinión contraria de los fiscales, en este caso el magistrado ha puesto a consideración un taller de filosofía, cursos de electricista y programación, una Diplomatura en Ciencias Políticas, una Licenciatura en Historia y un Doctorado en Ciencias Sociales.

La polémica decisión ha desatado de inmediato disgustos y sospechas en todo el arco político argentino ya que el mismo juez que le redujo la pena a Boudou, en 2014 había ordenado la libertad condicional del líder del grupo Quebracho, Fernando Esteche.

Actualmente, el exvicepresidente de Cristina Kirchner acusado de recibir dádivas y negociaciones incompatibles con la función pública en el caso Ciccone Calcográfica, está bajo arresto domiciliario y según el nuevo fallo ya podría pedir salidas transitorias.​ 

Los abogados de Boudou, Graciana Peñafort Alejandro Rúa, habían solicitado los 20 meses correspondientes de reducción de la pena pero el Juez Daniel Obligado no lo admitió tras sostener que no deberían equipararse las reducciones de los detenidos que están en los penales con las reducciones de quienes pudieron estudiar cursando prisiones domiciliarias.

La reacción de la oposición no se hizo esperar. La líder de la Coalición Cívica y ex Diputada nacional, Elisa Carrió, no tardó en referirse al tema afirmando que “hacer un curso de filosofía para lograr una reducción de la condena es un absurdo. Y para colmo las organizaciones de derechos humanos lo sostienen y no dicen nada”.

Por su parte, la presidenta del PRO y exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cuestionó la decisión del magistrado al afirmar que “hay una justicia para los privilegiados y otra para la gente común”.

Si se tiene en cuenta el tiempo que Boudou ya estuvo en Ezeiza y en su casa, el exvicepresidente ya estaría en condiciones de acceder a salidas transitorias y en el mes de julio tendría las condiciones dadas de obtener la libertad condicional ya que habría cumplido con dos tercios de su condena. 
Pese a la insistencia de los pedidos y reclamos de dirigentes amigos y exfuncionarios kirchneristas por obtener un indulto o una amnistía general para los ex funcionarios acusados de corrupción, Amado Boudou estaría logrando su libertad gracias a las bondades y beneficios que le otorga el sistema judicial argentino.

Fuente: gaceta.es

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