Traducido de Life Site News por TierraPura
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF) del Vaticano ha instigado un “juicio penal extrajudicial” contra el arzobispo Carlo Maria Viganò, acusando al prelado del “crimen de cisma”.
En un correo electrónico firmado por monseñor John Kennedy, de la Sección Disciplinaria del dicasterio y enviado al arzobispo italiano, que fue nuncio papal en Estados Unidos de 2011 a 2016, el dicasterio convocó a Viganò al Vaticano el 20 de junio para que “pudiera tomar nota de las acusaciones y pruebas relativas al delito de cisma”. Es decir, el dicasterio notificó al arzobispo que está acusado de hacer “declaraciones públicas que resultan en una negación de los elementos necesarios para mantener la comunión con la Iglesia católica; negación de la legitimidad del Papa Francisco, ruptura de la comunión con Él y rechazo del Concilio Vaticano Segundo”.
En respuesta , Viganò se defendió afirmando:
Frente a las acusaciones del Dicasterio, pretendo, como Sucesor de los Apóstoles, estar en plena comunión con la Iglesia Católica Apostólica Romana, con el Magisterio de los Romanos Pontífices y con la ininterrumpida Tradición doctrinal, moral y litúrgica que ellos han conservado fielmente.
Respecto a las acusaciones en su contra “como un honor”, Viganò subrayó su deseo de “repudiar, rechazar y condenar los escándalos, errores y herejías de Jorge Mario Bergoglio, quien manifiesta una gestión absolutamente tiránica del poder, ejercido contra el propósito que legitima autoridad en la Iglesia: una autoridad que es vicaria de la de Cristo, y como tal debe obedecerle sólo a Él”.
Después de argumentar que “ningún católico digno de ese nombre puede estar en comunión con esta ‘Iglesia bergogliana’, porque actúa en clara discontinuidad y ruptura con todos los Papas de la historia y con la Iglesia de Cristo”, Viganò pidió a los católicos que “ Oren para que el Señor venga en ayuda de Su Iglesia y dé valor a aquellos que son perseguidos por su fe”.
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