Por Andrés Vacca – BLes.com

Tim Cook, CEO de Apple, habría firmado un gran acuerdo con funcionarios del régimen comunista chino en 2016, a través del cual la compañía hizo varias concesiones además de pagar 275 mil millones de dólares a cambio de obtener ciertas exenciones legales clave que le permitieron allanar el camino hacia el éxito en el país asiático. 

El polémico acuerdo salió a la luz recientemente tras un informe publicado por la revista especializada en medios digitales The Information

Mientras el régimen chino profundizaba su represión regulatoria con las empresas del sector tecnológico, Tim Cook habría sido quien llevó a cabo las negociaciones con los funcionarios. En 2016 acordó el pago de 275 mil millones de dólares y otras concesiones como la inversión de millones de dólares en el país tanto en infraestructura como en capacitación e investigación de nuevas tecnologías en universidades y empresas locales. 

A cambio, Apple tendría el camino allanado para desarrollar sus negocios con mayores libertades.

Según reportó una persona familiarizada con el acuerdo a The Information, previo a la firma del mismo, el equipo de asuntos gubernamentales de Apple en China creó un memorando de pautas con la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma del país para endulzar las relaciones con los líderes comunistas.

El acuerdo finalmente incluyó compromisos de Apple para ayudar a los fabricantes chinos a construir “las tecnologías de fabricación más avanzadas” y capacitar a los trabajadores.

Entre otras cuestiones también incluyó la promesa de recurrir a proveedores chinos para obtener más piezas para dispositivos Apple, llegar a acuerdos con empresas de software locales, trabajar con universidades chinas en tecnología e invertir “muchos miles de millones de dólares más” de lo que Apple ya estaba invirtiendo en China.

También se pactó el desarrollo de nuevas tiendas minoristas a lo largo de todo el país.

En coordinación con el decimotercer plan quinquenal del régimen chino que, entre otras cuestiones, prioriza el desarrollo de las tecnologías, Apple se comprometió a “crecer junto con las empresas chinas para lograr beneficios mutuos y una situación en la que todos ganen”, ayudar a desarrollar las industrias tecnológicas de China y promover la ciencia, la educación y la protección del medio ambiente. 

A cambio de todo esto el régimen se comprometió “el apoyo y la asistencia necesarios” para el desarrollo de la firma en el mercado local.

Los efectos del acuerdo fueron fructíferos, al menos con seguridad para Apple quien vió crecer su negocio exponencialmente durante los últimos años en China. Sólo en el último año, la firma registró un récord de 68 mil millones de dólares en ingresos provenientes de China.

Por su parte, Apple también parece haber hecho su contribución acorde a lo pactado. Según reportó Business Insider, el gigante tecnológico anunció un acuerdo con el mayor fabricante de turbinas eólicas de China, Xinjiang Goldwind Science and Technology, en 2016, hizo planes para trasladar las operaciones de iCloud a China en 2017, lanzó un fondo de inversión de 300 millones de dólares para energía limpia en China en 2018, abrió al menos 11 tiendas minoristas en China continental e incorporó al fabricante chino Luxshare Precision Industry a su producción del iPhone 13.

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