Por José Hermosa – BLes.com
La marcada hostilidad del régimen comunista chino hacia los periodistas extranjeros ahora incluye a los estudiantes, y se acentúa aún más en la provincia de Henan donde los funcionarios adquirieron un sistema de vigilancia que los rastrea como “personas sospechosas”.
El sistema integra al menos 3.000 cámaras de reconocimiento facial integradas a varias bases de datos nacionales y regionales, de acuerdo con Reuters del 29 de noviembre.
La empresa tecnológica china Neusoft, obtuvo la adjudicación del contrato por 782.000 dólares desde el 17 de septiembre, y aunque los planes de la administración provincial se iniciaron en julio recién ahora fueron revelados.
Lo más llamativo de esta estrategia de vigilancia es que especifica que su objetivo son los periodistas y los estudiantes extranjeros, e impulsa al personal de seguridad a ubicarlos rápidamente y obstaculizar sus actividades.
Por su parte, la empresa estadounidense de investigación en materia de vigilancia, IPVM, fue la que descubrió este plan de vigilancia, tras hacer el seguimiento de la expansión de las redes de vigilancia en Henan.
El jefe de operaciones del IPVM, Donald Maye, se refirió al sofisticado sistema utilizado por el Partido Comunista de China (PCCh), diciendo:
“Aunque la República Popular de China (RPC, por la sigla) tiene un historial documentado de detenciones y castigos a periodistas por hacer su trabajo, este documento ilustra el primer caso conocido de que construye una tecnología de seguridad a medida para agilizar la supresión estatal de los periodistas”, expresó Maye.
Asimismo, el documento de licitación del Departamento de Seguridad Pública de Henan, de casi 200 páginas, señala que otro de sus objetivos son las “mujeres de países vecinos que son residentes ilegales”.
Adicionalmente, el sistema de rastreo debería ser de tal precisión que permita la identificación de las personas cuyos rostros estén parcialmente cubiertos por una máscara o unas gafas.
La estrategia incluye la dedicación de 2.000 operadores, entre funcionarios y policías, quienes intervendrán de acuerdo con tres categorías de ‘peligrosidad’ de las personas detectadas.
Justamente en julio, cuando se ordenó la licitación del sistema de vigilancia, se intensificó la persecución del PCCh a los periodistas extranjeros que cubrían las devastadoras inundaciones en la provincia de Henan, según las denuncias de estos.
En los últimos años, el PCCh ha gastado miles de millones de dólares para desarrollar, comprar e implementar la última tecnología como el reconocimiento facial, la inteligencia artificial y otras tecnologías digitales para agregar a su red de sistemas de monitoreo. Informó Fox News.
Las autoridades chinas combinan tecnologías antiguas y de vanguardia (escáneres de teléfonos, cámaras de reconocimiento facial, bases de datos de rostros y huellas dactilares y muchas otras) en herramientas de gran alcance para el control autoritario
Una vez combinadas y en pleno funcionamiento, las herramientas ayudan a la policía a captar las identidades de las personas que caminan por la calle, averiguar con quién se están reuniendo e identificar quiénes pertenecen y quiénes no pertenecen al Partido Comunista.
Actualmente, dentro de China, hay instaladas 1 cámara de vigilancia pública por cada 4 ciudadanos. Y se espera que las instalaciones aumenten el próximo año a 567 millones de cámaras.
El sistema de vigilancia desarrollado en China, es además lo que le permite al régimen la intensa persecución de disidentes políticos y de distintas minorías como los uigures o practicantes de Falun Gong.
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