Un abogado del expresidente Donald Trump dijo que la actual campaña de destitución es un esfuerzo partidista que podría volverse en contra de los demócratas si pierden influencia, sugiriendo que la exsecretaria de Estado Hillary Clinton también podría ser destituida.

Respondiendo a una pregunta del senador Marco Rubio (republicano de Florida) durante la audiencia de destitución del viernes, el abogado de Trump, Michael van der Veen, argumentó que la secretaria de la era Obama podría enfrentarse a un proceso de destitución similar en algún momento del futuro.

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«¿No es cierto que bajo este nuevo precedente, una futura Cámara -enfrentada a la presión partidista para ‘encerrarla’- podría impugnar a una exsecretaria de Estado, y un futuro Senado se vería obligado a llevarla a juicio y potencialmente inhabilitarla para cualquier cargo futuro?», preguntó Rubio.

«Si lo ves a su manera, sí», dijo van der Veen, refiriéndose a los responsables demócratas del impeachment. «Si se hace como ellos quieren, eso podría ocurrirle al ejemplo de allí -una exsecretaria de Estado- pero podría ocurrirle a mucha gente. Y esa no es la forma en que se supone que esto funciona».

Sin embargo, el principal gestor del impeachment en la Cámara de Representantes, Jamie Raskin (demócrata de Maryland), contraatacó insistiendo en que la hipótesis de Rubio «no tiene relación con este caso», ya que Clinton «no fue sometida a un impeachment por su conducta mientras estaba en el cargo».

En la audiencia del viernes, el abogado de Trump también argumentó que las declaraciones del expresidente que supuestamente condujeron a los disturbios del 6 de enero en el Capitolio -a los que se le acusa de «incitar» como base del esfuerzo de destitución- eran «prácticamente indistinguibles» de la retórica utilizada por los políticos estadounidenses durante «cientos de años».

«Innumerables políticos han hablado de ‘luchar por nuestros principios’. El eslogan de campaña de Joe Biden era ‘Batalla por el alma de América’. Ningún ser humano cree seriamente que el uso de esa terminología metafórica sea una incitación a la violencia política», dijo van der Veen.

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Añadió que, aunque Trump no utilizó en ningún momento un «lenguaje de incitación», muchos demócratas en Washington han recurrido ellos mismos a una «retórica profundamente imprudente, peligrosa e incendiaria en los últimos años», señalando a Clinton, de quien dijo que «declaró ridículamente que las elecciones [de 2016] fueron robadas por Rusia».

Antes de la última audiencia, la propia Clinton se metió en el drama del impeachment el jueves por la noche, tuiteando que si los republicanos del Senado no condenan a Trump, «no será porque los hechos estén con él o porque sus abogados hayan montado una defensa competente. Será porque el jurado incluye a sus co-conspiradores».

Fuente: trikooba.com

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