Traducido de breitbart.com Por TierraPura.org
Un simpatizante del Partido Comunista Cubano ubicado en Miami amenazó de muerte, esta semana, al líder de uno de los más prominentes grupos anticomunistas de la comunidad cubana en el exilio, refiriéndose al sangriento asesinato del líder marxista ruso León Trotsky.
La amenaza de muerte se produjo en un video que YouTube sigue manteniendo en su red en este momento, identificado con la etiqueta #Biden2020. El video permite a los seguidores enviar dinero al creador del contenido, lo que significa que YouTube hasta le permite al individuo en cuestión monetizar las amenazas de muerte.
El blanco de la amenaza de muerte – Orlando Gutiérrez-Boronat, cofundador del Directorio Democrático Cubano y jefe de la Asamblea Paraguas de la Resistencia Cubana, así como también frecuente colaborador de Breitbart News – nos dijo que las autoridades están al tanto de la amenaza y han iniciado una investigación. Señaló que distaba mucho de ser la primera vez que personas y grupos asociados con el régimen castrista amenazaban y atacaban a los defensores del exilio cubano, incluso asesinando a algunos miembros de la comunidad, pero que las amenazas “nos inspiran a luchar aún más”.
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Los comentarios que sugieren el inminente asesinato del líder del Directorio vienen después de meses de un discurso y un comportamiento cada vez más violento por parte de los izquierdistas en los Estados Unidos. Disturbios organizados por grupos de extrema izquierda se convirtieron en un elemento básico en las principales ciudades de Estados Unidos en 2020, supuestamente actos en oposición al “imperialismo” y “racismo” americano. Prominentes conservadores, o simplemente transeúntes que llevaban ropa o equipo que identificaba su ideología, eran habitualmente víctimas de ataques de los izquierdistas. Personas que no revelaban a simple vista sus preferencias políticas también fueron víctimas de la violencia de las turbas en algunas zonas del país por frecuentar restaurantes y no dejar de comer para disculparse por su supuesto racismo.
En Miami, el corazón de la comunidad de exiliados cubanos y donde tienen su sede el Directorio y la Asamblea, los izquierdistas adoptaron símbolos del comunismo latinoamericano, entre ellos la bandera de la tiranía sandinista nicaragüense y la imagen del asesino en masa argentino Ernesto “Che” Guevara, durante los disturbios donde supuestamente reclamaban justicia racial.
Edmundo García, un autoproclamado “periodista” con un historial de intentos de causar conflictos en actos de la comunidad de exiliados cubanos, advirtió a Gutiérrez-Boronat que pronto podría correr la misma suerte que León Trotsky – muerto a hachazos, una semana después de que la televisión estatal cubana atacara a Gutiérrez-Boronat por, entre otras infracciones, tocar “La bandera estrellada” en un acto del exilio cubano. Gutiérrez-Boronat también había publicado un artículo en inglés en el Breitbart News explicando el rechazo de la comunidad de exiliados cubanos al Partido Demócrata la semana pasada.
García hizo las declaraciones explícitas durante una transmisión en vivo por YouTube, desde una sala decorada con fotos de Fidel Castro, que sigue siendo accesible en el momento de esta publicación a pesar de su abierta incitación a la violencia, una violación de las políticas de uso de YouTube.
El video, cuyo título se refiere a Gutiérrez-Boronat como “fascista”, está etiquetado como #Biden2020.
Orlandito… tu Mercader podría estar en camino… podrías tener un Mercader en tu camino”, dijo García, refiriéndose al asesino de Trotsky, el comunista español Ramón Mercader. “Para aquellos que no entendieron este mensaje, esta advertencia… sólo busquen en Google el nombre ‘Ramón Mercader’ y sabrán a qué me refiero”.
“Nunca tendrán paz en Cuba, ni ustedes ni nadie que exija lo que ustedes exigen”, concluyó.
Después de los informes locales de Miami que destacaban la retórica violenta contra un líder comunitario de larga data, García subió otro video en el que afirmaba que las fuerzas del orden no podrían evitar que amenazara la vida de aquellos con los que no estaba de acuerdo porque había redactado su amenaza con demasiada inteligencia. García empleó entonces una retórica vulgar y homófoba para seguir atacando a los líderes anticomunistas.
“En mi opinión, estos individuos son parte de la oscura red de influencia, intimidación y espionaje que una despótica tiranía extranjera ha establecido en suelo estadounidense para espiar y coaccionar a los ciudadanos estadounidenses. Debería ser absolutamente inadmisible”, dijo Gutiérrez-Boronat a Breitbart News. Señaló que los activistas cubanos en el exilio han enfrentado la violencia de los simpatizantes comunistas durante décadas.
“Otros miembros de la comunidad de exiliados han recibido amenazas e incluso han sido asesinados en años pasados por su activismo a favor de la democracia para Cuba. Hay un historial de esto en la comunidad de exiliados”, señaló Gutiérrez-Boronat. “Esto no cambiará nuestra defensa de la democracia en Cuba, nos inspira a luchar aún más. Estamos dispuestos a asumir todos los riesgos y sacrificios que conlleva esta lucha. Ciertamente, nuestros hermanos y hermanas de la Resistencia en la isla nos han dado el ejemplo.”
“Cuba está lista para el cambio y estas acciones del Régimen Comunista indican lo desesperados que están por la creciente posibilidad de perder el poder”, añadió.
El más reciente asesinato de ciudadanos americanos por el régimen de Castro y sus partidarios ocurrió en 1996. Los cubano-estadounidenses Carlos Costa, Armando Alejandre, Mario de la Peña y Pablo Morales eran miembros de un grupo conocido como Hermanos al Rescate, que se especializaba en encontrar aviones sobre el Mar Caribe para rescatar refugiados cubanos varados que intentaban huir del régimen comunista en balsas y otras embarcaciones improvisadas. Fidel Castro había permitido la salida de cubanos de la isla en ese momento, pero casi exclusivamente a través de este medio, a menudo mortal.
El ejército cubano disparó a los cuatro hombres desde el cielo, matándolos, ilegalmente sobre aguas internacionales el 24 de febrero de 1996. El presidente Bill Clinton no hizo nada en respuesta; el presidente Barack Obama liberó a los cinco espías responsables de la vigilancia que permitió el asesinato de los mismos, permitiéndoles un recibimiento de héroes en La Habana.
Los “Cinco Cubanos”, como llegaron a ser conocidos los espías, participaron activamente en grupos de infiltración como Directorio como parte de un programa más amplio conocido como la “red de avispas”.
“En 1999, fuimos avisados por las autoridades, y más tarde apareció en las transcripciones de la Corte, que estábamos siendo seguidos y vigilados por la Red de Avispas de Castro en Miami. Nuestros nombres aparecieron en una lista que el FBI interceptó y fue presentada en la corte federal”, dijo Gutiérrez-Boronat a Breitbart News.
Más recientemente, los miembros de la Asamblea de la Resistencia Cubana fueron objeto de un violento asalto público en Panamá cuando intentaban visitar un busto de José Martí, una figura histórica cubana muy venerada. Una turba de simpatizantes de Castro tendió una emboscada al grupo, en Panamá, en 2015, con motivo de la Cumbre de las Américas, en un ataque grabado en vídeo.
La Organización de los Estados Americanos (OEA) invitó a Cuba a la Cumbre de las Américas de 2015, a pesar de que Cuba violó abiertamente el requisito de la cumbre de que los participantes fueran Estados democráticos.
Gutiérrez-Boronat ha estado muy involucrado en los esfuerzos por concientizar sobre los abusos de los derechos humanos que sufren los cubanos en la isla bajo el régimen de Castro. Sus organizaciones han ampliado recientemente sus esfuerzos a iniciativas educativas sobre la historia violenta del socialismo en respuesta a la creciente popularidad de la ideología en los Estados Unidos. En octubre, la Dirección Democrática Cubana organizó una caravana y el correspondiente seminario “drive-in” en Miami, en oposición al comunismo y el socialismo, que atrajo a unas decenas de miles de automóviles.
Las organizaciones de defensa también se han hecho eco de las preocupaciones internacionales, emitiendo declaraciones de apoyo al gobierno de Taiwán contra los intentos del Partido Comunista Chino de usurpar su soberanía. La Asamblea de la Resistencia Cubana es uno de los pocos miembros latinoamericanos de la Coalición para Acabar con el Trabajo Forzoso en la Región Uigur, que exige que se ponga fin a la práctica del Partido Comunista chino de encarcelar y esclavizar a los miembros de la minoría étnica uigur en campos de concentración.
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