Cada día sale a la luz más información sobre la corrupción y manipulación con la que se maneja la empresa electoral Dominion en todo el mundo. Wikileaks acaba de publicar emails entre John Podesta y un asesor legal de la empresa, que sugieren que Dominion tuvo un comprometido rol en las elecciones americanas del 2016, cuando Donald Trump derrotó a Hillary Clinton contra todo pronóstico. No olvidemos además que John Podesta, jefe de la campaña presidencial de Hillary Clinton en el 2016, fue vinculado a una red de pedofilia y tráfico de niños, elite conocida como “Pizzagate”.

Pese a que toda la maquinaria de medios con sus “fake news”
estaba en contra de Trump en ese momento y proyectaba todas sus expectativas sobre Hillary Clinton, Donald Trump salió victorioso.

La campaña de Hillary y los demócratas ya contaban con el apoyo de Dominion en las elecciones del 2016. 

En el 2020, para estar seguros de que no volviera a ganar Trump, el fraude electoral fue cometido a toda marcha. Es muy probable que el Presidente de los EE. UU. ganó las elecciones con más de 70% del electorado y que por lo menos 100 millones de estadounidenses votaron por él, una mayoría aplastante nunca vista en la historia. 

Nunca vamos a saber los números exactos, pero en nombre de la rectitud y la verdad, no podemos aceptar el mayor fraude cometido en la historia electoral americana y aceptar que Joe Biden ilegalmente e ilegítimamente se vuelva presidente de los Estados Unidos.

Traducido de Gateway Pundit por TierraPura.org

Por Cassandra Fairbanks 

Un correo electrónico previamente publicado por WikiLeaks revela que un asesor legal de Dominion se reunió con John Podesta durante la campaña de Hillary Clinton  para conversar sobre las formas en que podrían ayudar a derrotar a Donald Trump durante las elecciones en el 2016.

En 2018, Dominion Voting anunció que había sido adquirido por su equipo directivo y por Staple Street Capital, una empresa de capital privado con sede en Nueva York, que estaba siendo asesorada por Kirkland & Ellis LLP.

Durante la campaña de Clinton, según una cadena de correos electrónicos  publicada por WikiLeaks, el socio de Kirkland & Ellis LLP, Kamran S. Bajwa, se reunió con John Podesta mientras ofrecía “cualquier cosa” para ayudar a derrotar a Donald Trump. Podesta, en ese momento, era el presidente de la campaña presidencial de Hillary Clinton para el 2016.

El sábado 19 de diciembre de 2015, Bajwa escribió a Podesta que “fue un placer conocerlo este pasado jueves en Nueva York. Como ya se ha dicho, quiero hacer todo lo que pueda para compartir ideas, recaudar fondos, reclutar voluntarios de la campaña y cualquier otra cosa que pueda ayudar a su campaña. Espero que mis pequeños esfuerzos para presentarles a un grupo creciente de profesionales como yo puedan impulsar su importante trabajo para la campaña de la Secretaria de Estado Clinton”.

“Vengo a Nueva York con frecuencia y me gustaría tener la oportunidad de sentarme con ustedes y discutir la mejor manera de coordinar nuestros esfuerzos. Si están en Nueva York el 5 de enero, estaré libre ese día para reunirme con ustedes en cualquier momento y lugar que les convenga.”

Podesta respondió diciendo “no puedo recordar si conversamos sobre el efecto de Trump en el reclutamiento radical y de ISIS. ¿Está siguiendo eso?”

“John, sólo una nota rápida para decir que estaba poniéndome al día con mi socio Bill Singer en la oficina y haciéndole saber mis intenciones de ayudar a su campaña tanto como pueda. Fue muy efusivo en sus elogios hacia usted y me pidió que le enviara sus saludos. Espero que me contacten después de las fiestas”, escribió Bajwa el 21 de diciembre.

El 2 de enero de 2016, Bajwa volvió a pedir reunirse con Podesta una vez más. Dijo que “quería seguir con nuestra breve conversación de hace unas semanas y ver si estaría disponible para reunirnos el próximo martes en Nueva York”. Estaré en la ciudad por trabajo y mi horario es flexible el martes, así que si puede reunirse, puedo ir a donde esté y a cualquier hora antes de las 5 de la tarde”.

Podesta reenvió el correo electrónico a una empleada de la campaña de Clinton, Milia Fisher, y le pidió que buscara la hora de la reunión.

Dominion se ha convertido en el centro del escándalo de fraude electoral, ya que las anomalías y las pruebas de fraude son las más importantes en los estados que utilizan sus máquinas.

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