Traducido de Slay News por TierraPura
Rusia está dando otro paso importante hacia un Internet totalmente controlado por el Estado, con legisladores que impulsan una propuesta que haría obligatorios los sistemas biométricos y de identificación digital del país para toda la verificación de edad en línea.
De aprobarse, el plan eliminaría de facto el anonimato en línea en Rusia.
Obligará a los ciudadanos a verificar su identidad a través de sistemas gubernamentales cada vez que accedan a contenido «para adultos» o «potencialmente dañino».
La propuesta, debatida el 28 de octubre, se promueve como una iniciativa de protección infantil. – Anuncio –
Sin embargo, los críticos advierten que se trata del último frente en la larga campaña de Moscú para someter internet al control total del Estado.
Los funcionarios afirman que la medida tiene como objetivo impedir que los menores vean pornografía, contenido violento y lo que ellos denominan «propaganda de comportamiento antisocial».
Pero la definición de contenido restringido es tan amplia que podría abarcar fácilmente el discurso político, la sátira o la disidencia.
Red de verificación controlada por el gobierno
En el centro del plan se encuentra Gosuslugi, el principal portal de servicios digitales del Kremlin, que ya funciona como centro neurálgico para la identificación estatal y el seguimiento de los ciudadanos.
El sistema se conecta directamente al Sistema Unificado de Identificación y Autenticación (ESIA) de Rusia y al Sistema Unificado de Biometría (UBS).
Ambos están controlados por el gobierno federal.
El diputado de la Duma estatal, Anton Nemkin, antiguo oficial del FSB, afirmó que las redes «podrían utilizarse para verificar la edad sin transmitir directamente los datos del pasaporte a plataformas de terceros».
En la práctica, eso significa que el Estado se convierte en el intermediario obligatorio entre cada ciudadano ruso e Internet, otorgando o denegando el acceso en función de la verificación biométrica.
¿Soberanía digital o vigilancia total?
Los expertos en derechos digitales afirman que esta política perpetúa una erosión de la privacidad en línea que se viene produciendo desde hace una década en Rusia.
Desde 2012, Moscú ha justificado una nueva capa de censura tras otra bajo la bandera de la «protección de los niños». – Anuncio –
Cada ampliación ha proporcionado al Estado un conocimiento más profundo de la actividad digital privada de los ciudadanos.
La nueva propuesta se alinea con el impulso de Rusia hacia la «soberanía digital», una estrategia para aislar y controlar el ecosistema de Internet del país, al tiempo que se bloquean las plataformas extranjeras y se utilizan herramientas de anonimización.
Andrei Svintsov, vicepresidente del Comité de Política de Información de la Duma Estatal, declaró recientemente que el anonimato en línea en Rusia desaparecerá por completo en «tres años, cinco como máximo».
Este nuevo sistema aceleraría ese objetivo al garantizar que el comportamiento en línea de cada ciudadano esté directamente vinculado a una identidad digital verificada almacenada en bases de datos estatales.
De implementarse, los rusos se verían obligados a iniciar sesión a través de ESIA cada vez que vean contenido etiquetado como para adultos, incluso si esa etiqueta se aplica de forma vaga o política.
El resultado sería un registro permanente, controlado por el Estado, que vincularía las identidades personales con los hábitos de navegación y consumo privados, otorgando a las autoridades un poder de vigilancia sin precedentes.
Mientras tanto, gobiernos de otros países han probado diversas tecnologías de verificación de edad.
Sin embargo, el modelo ruso se distingue por su total dependencia de bases de datos biométricas centralizadas y la supervisión directa del gobierno.
Los analistas afirman que no se trata solo de proteger a los menores; se trata de normalizar los controles de identidad constantes, construyendo un marco digital donde el Kremlin pueda monitorear, restringir o castigar el comportamiento en línea a su antojo.









