A medida que Silicon Valley consolida su papel como el principal centro mundial de innovación y tecnología, los expertos en inteligencia estadounidenses advierten que la carrera global por la tecnología ha tomado un giro más oscuro e inquietante. Según un informe reciente de «The Times» de Londres, agentes chinos y rusos utilizan cada vez más lo que los expertos describen como «espionaje sexual» (encuentros seductores, manipulación romántica e infiltración social) para robar tecnología y secretos industriales estadounidenses.
James Mulvenon, director de inteligencia de Pamir Consulting, una empresa que evalúa el riesgo para las empresas estadounidenses que invierten en China, declaró a «The Times» que él mismo se ha convertido en un objetivo de estos planes.
‘Espionaje sexual’
“He recibido numerosas solicitudes de conexión en LinkedIn de mujeres chinas jóvenes y atractivas, y son increíblemente sofisticadas”, dijo Mulvenon. “Últimamente está empeorando”. Recordó un incidente en una conferencia en Virginia centrada en los riesgos de inversión relacionados con China. “Dos mujeres chinas hermosas intentaron colarse en el evento”, dijo, y agregó: “No las dejamos entrar, pero ya sabían todo sobre la conferencia. Es un fenómeno, y es muy extraño”.
Con tres décadas de experiencia estudiando operaciones de espionaje, Mulvenon advirtió que Estados Unidos tiene una debilidad inherente cuando se trata de tales tácticas. “Nosotros no hacemos esto, ni legal ni culturalmente, por lo que tienen una ventaja asimétrica”, dijo
Especialistas en contrainteligencia dijeron a “The Times” que el engaño sexual es solo una capa de una infiltración mucho más amplia en el sector tecnológico estadounidense. Según fuentes internas, China ha estado explotando las competencias de presentación de startups para obtener planes de negocios confidenciales y perjudicar a las empresas tecnológicas estadounidenses. En febrero, el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes informó que el Partido Comunista Chino (PCCh) había llevado a cabo más de 60 operaciones de espionaje en Estados Unidos durante los últimos cuatro años. “Probablemente solo la punta del iceberg”, señaló el informe.
Trampas para startups
Un alto funcionario de contrainteligencia estadounidense explicó que tanto China como Rusia ahora dependen cada vez más de ciudadanos comunes en lugar de espías profesionales para llevar a cabo estas infiltraciones de alto nivel. “Ya no perseguimos a oficiales de la KGB en hoteles alemanes”, dijo el funcionario. “China está movilizando a toda su sociedad para penetrar nuestra base tecnológica y de talento”.
Otro exoficial de inteligencia reveló un caso que involucraba a una mujer rusa que se casó con un ingeniero aeroespacial estadounidense. “Ella se formó en una ‘escuela rusa de poder blando’”, dijo el funcionario. “Diez años después reapareció en Estados Unidos como experta en criptomonedas y se infiltró en los círculos de innovación de defensa; su marido no tenía ni idea”.
“A menudo se casan, tienen hijos y luego realizan recopilación de inteligencia de por vida”, añadió el oficial.
Según la Comisión sobre el Robo de Propiedad Intelectual Estadounidense, Estados Unidos pierde hasta la friolera de 600 mil millones de dólares anuales debido al robo de secretos comerciales, y China es el principal culpable.
La estrategia de ‘retirar dinero’
En 2023, Klaus Pflugbeil, un ingeniero alemán residente en Ningbo, China, fue sentenciado a 24 meses de prisión tras intentar vender archivos de tecnología patentada de Tesla por 15 millones de dólares a un agente encubierto. Su cómplice, Shao Yilong, sigue prófugo. Ambos hombres habían trabajado anteriormente para una empresa canadiense adquirida por Tesla y posteriormente utilizaron datos robados para lanzar una empresa rival en China.
“Este esquema benefició directamente a la República Popular China en una industria clave”, declaró el Fiscal General Adjunto de Estados Unidos, Matthew Olsen.
Desde entonces, funcionarios estadounidenses han advertido a las empresas emergentes sobre concursos internacionales de presentación de proyectos que exigen a los participantes que envíen detalles de propiedad intelectual o datos personales, a veces bajo el pretexto de “premios” u otros pagos de bonificación transferidos directamente a cuentas personales.
Mulvenon señaló que los fondos de capital riesgo respaldados por el Estado chino a menudo utilizan las ofertas de inversión como una forma de infiltración y pirateo informático de alto nivel, dirigidos especialmente a empresas emergentes que alguna vez recibieron financiación del Pentágono o de DARPA. “Es una nueva versión de la estrategia de ‘retirada de efectivo’ de China”, afirmó
Andrew Kim, presidente de la organización sin fines de lucro Future Union, criticó la continua vulnerabilidad del sector tecnológico estadounidense. «Es impactante que estas competencias sigan ocurriendo después de años de exposición», dijo Kim.
La guerra económica de China
Una investigación del Senado descubrió que entre 2023 y 2024, seis de las 25 principales empresas estadounidenses que recibieron fondos federales tenían vínculos directos con China, lo que representa casi 180 millones de dólares en subvenciones totales. El experto en seguridad Jeff Stoff advirtió que Beijing ha aprendido a explotar las debilidades del sistema estadounidense. «Los chinos entienden nuestras instituciones a la perfección y saben cómo operar en las brechas», dijo.
Añadió que las agencias de contrainteligencia estadounidenses están «luchando por ponerse al día» debido a una supervisión insuficiente. «China está atacando a nuestras empresas emergentes, nuestras universidades y nuestros programas de investigación de defensa, y ni siquiera hemos aparecido en el campo de batalla», advirtió Stoff
En otro informe del “New York Post”, la ex “espía sexual” rusa Aliia Roza advirtió a los profesionales de Silicon Valley que las élites tecnológicas son objetivos principales para el engaño basado en el amor. Tras desertar hace años, Roza dijo que fue entrenada desde su adolescencia para manipular la vulnerabilidad emocional. “Los agentes son entrenados para aparecer en la vida del objetivo siete veces antes de establecer contacto, para crear confianza, y luego lanzan una fase de ‘bombardeo de amor’”, dijo. “Si no pueden obtener la información, amenazan con desaparecer”.
Roza señaló que muchos hombres muy inteligentes en la industria tecnológica son socialmente vulnerables, especialmente los solteros. “Muchos de ellos son brillantes en tecnología, pero frágiles en las relaciones”, dijo, y agregó: “Los hombres solteros son objetivos especialmente fáciles”.
Ahora residente de EE. UU. con una tarjeta verde, Roza ha hecho pública su historia para educar a otros sobre la manipulación emocional. “Mi misión es ayudar a las personas a reconocer y defenderse del control psicológico”, dijo.
Roza ahora colabora con el autor de bestsellers Neil Strauss en un podcast titulado “To Die For”, que expone las oscuras realidades del espionaje sexual. “La educación es prevención”, dijo Roza al instar a los trabajadores de Silicon Valley a verificar las identidades fuera de línea, ralentizar las relaciones y rechazar cualquier solicitud que involucre información confidencial o urgente.
Por Luke
