
Voz Media – Por Carlos Dominguez
Ya estamos en junio, lo que para la agenda progre significa el mes del Orgullo LGBT. En años anteriores, hemos visto cómo, bajo la bandera del ‘amor’ y la ‘tolerancia’, se producen sórdidas celebraciones en distintas ciudades del mundo. En algunos casos, estos eventos son financiados por el contribuyente, pero también por grandes corporaciones que buscan rentabilizar su participación durante la fiesta anual de la agenda LGBT.
Durante años, sobre todo durante la Administración Biden, importantes empresas se jactaban de patrocinar estas celebraciones, ya que les era muy rentable por la cantidad de publicidad que esto les generaba, sin olvidar el sentimiento de ‘superioridad moral‘ del que tanto se vanaglorian los nuevos paladines de la ‘justicia social‘.
Después de que el presidente Trump cogiera las riendas del país, y con el mes del ‘Orgullo’ encima, estas mismas corporaciones han decidido esconder la cabeza como el avestruz.
Desde la llegada del líder republicano a la Casa Blanca, el presidente ha firmado órdenes ejecutivas eliminando las infames políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI), abanderadas por los demócratas durante el mandato de Joe Biden.
Desde entonces, grandes compañías como Meta, Amazon y Google han echado para atrás sus programas DEI, tratando de alinear sus políticas empresariales con la visión de la Administración Trump.
Asimismo, la semana pasada, el FBI envió un correo a sus empleados en el que se les instruyó no participar este año en las actividades del ‘Orgullo’.
Las corporaciones ya no pagan la fiesta del ‘Orgullo’
El lobby del movimiento LGBT se ha puesto a temblar y las grandes compañías, que antes financiaban un sinnúmero de eventos del ‘Orgullo’, ya no están dispuestas a seguir pagando la fiesta. ¿Las razones? Un boicot general de gran parte de la sociedad civil que todavía defiende el sentido común.
Una encuesta reciente de Gravity Research, en la que participaron 200 empresas, reveló que en 2025 existe un 39% de compañías que han decidido retirar su respaldo durante el mes del ‘Orgullo’: incluido el patrocinio financiero, la publicación de mensajes de apoyo en las redes sociales y la venta de artículos relacionados con la agenda LGBT.
El año pasado, sólo el 9% de las empresas dijeron a Gravity Research que modificarían sus planes de participación en el mes del ‘Orgullo’.
Esta semana, también se ha podido ver cómo Target ha dado marcha atrás en la venta de artículos LGBT después de que, en 2023, la empresa se enfrentara a reacciones negativas por comercializar productos del ‘Orgullo’ para niños.
Asimismo, el número de corporaciones que han retirado su financiamiento es grande. Forbes publicó recientemente que Anheuser-Busch, la compañía detrás de Bud Light y la mayor productora de cerveza de Estados Unidos, con sede en St Louis, MO, puso fin al patrocinio del ‘Orgullo’ en esa ciudad.
“Para ellos, levantarse de la mesa de negociaciones y decir ‘ya no le vemos valor’ es como una mala ruptura”, declaró Marty Zuniga, presidente del St Louis Pride.
La pérdida de patrocinantes representa para Zuniga un déficit de unos $150.000 para las celebraciones de este año.
Asimismo, Anheuser-Busch también ha dejado de financiar el evento en la ciudad de Columbus, OH, reportó el medio local Wosu.
Otras grandes empresas como Nissan, Lowe’s y Walmart han retirado su financiamiento del Columbus Pride.
De acuerdo a Densil Porteous, CEO de Stonewall Columbus, la pérdida de patrocinio, al igual que para el St Louis Pride, representa unos $150.000 para este año.
Por su parte, el San Francisco Pride también ha perdido respaldo, ya que Anheuser-Busch igualmente dejó de apoyar el evento en esa ciudad, junto a grandes empresas como Comcast, Nissan y Diageo, recogió Forbes.
Un portavoz de Nissan expresó que el fabricante de automóviles no patrocinará ningún festival del ‘Orgullo’ este año, ya que está revisando todos sus gastos de marketing y ventas, recogió CNBC.
Suzanne Ford, la CEO del San Francisco Pride, declaró a SFGATE que han perdido unos $300.000 para las celebraciones del ‘Orgullo’ previstas para junio.
“Creo que el hecho de que tantas empresas se retiren indica que nos encontramos en un entorno político diferente al que hemos vivido en mucho, mucho tiempo”, declaró Ford a CNBC.
Asimismo, Ford también explicó que ya no tiene relación con Meta, ya que el personal que había trabajado anteriormente con el ‘Orgullo’ de San Francisco había abandonado la empresa en los últimos dos años.
Por su parte, la junta directiva del ‘Orgullo’ de Houston dijo a Forbes que algunas empresas habían recortado su apoyo financiero hasta en un 75%, lo que representa un total de $100.000 en recortes de patrocinio corporativo para la ciudad, mientras que otros patrocinadores han optado por respaldar las celebraciones “sin participación pública“.
En cuanto a la ciudad de Nueva York, el director de medios de comunicación del ‘Orgullo’, Chris Piedmont, declaró a Forbes que varias empresas patrocinadoras han reducido sus presupuestos, mientras que otras han aplazado su decisión de apoyar o no las celebraciones del ‘Orgullo’ de este año, aunque no mencionó empresas concretas.
Sin embargo, The Drum recientemente reportó que Mastercard, Citi, PepsiCo, Nissan y Target no patrocinarían las celebraciones del ‘Orgullo’ en NYC.
El ‘Orgullo’ de Nueva York y el de Seattle han dicho que tienen que compensar déficits de hasta $350.000, recogió CNBC.
Capital Pride Alliance, con sede en Washington DC, que organiza la celebración bianual WorldPride, declaró que Booz Allen Hamilton, Comcast y Deloitte habían apoyado regularmente el festival del ‘Orgullo’, pero han igualmente declinado su patrocinio para este año.
Target y Bud Light revisan sus políticas DEI y se alejan de la agenda LGBT
En enero, Target dio marcha atrás en sus políticas DEI, incluidas algunas que pretendían que su plantilla y su mercancía tenía que reflejar la simbología de la comunidad LGBT.
En el comunicado enviado a sus empleados, la empresa con sede en Minneapolis dijo que dejaría también de informar a grupos externos que miden los índices de diversidad e igualdad corporativa.
Estas medidas se implementaron luego de que, en 2023, la empresa tuvo que hacer frente a grandes críticas por comercializar artículos infantiles con temática del ‘Orgullo’.
El caso de Bud Light es emblemático. Dylan Mulvaney, una personalidad transgénero de las redes sociales, formó parte de su campaña promocional en abril de 2023. La campaña provocó la reacción de los consumidores, lo que llevó a un boicot de Bud Light y su empresa matriz, Anheuser-Busch.
La empresa experimentó un fuerte descenso en las ventas tras la reacción, con caídas del 11% al 26% en el mes posterior a la campaña. Anheuser-Busch también vio caer el precio de sus acciones un 20%, lo que provocó una rebaja de su calificación.
Como resultado del boicot, Bud Light perdió su posición como la cerveza más vendida en EEUU por primera vez en 20 años, y Modelo Especial pasó a ocupar el primer puesto.
Envía tu comentario
Últimas
