Traducido de Life Site News por TierraPura
Chile se ha unido a un grupo creciente de países que están tomando medidas para rechazar la ideología de género.
La siguiente declaración puede atribuirse a Tomás Henríquez , director de Advocacy para América Latina:
El Senado chileno aprobó una ley crítica que prohíbe al gobierno gastar fondos públicos en intervenciones quirúrgicas u hormonales para niños menores de 18 años para la llamada “reasignación de género/sexo”.
Se trata del primero de su tipo en América Latina y sienta un precedente importante para la protección de los niños, no sólo en Chile, sino en todos los países de América Latina. Chile merece elogios por haber dado un paso importante para decir no a los peligros de la ideología de género.
Ahora, otros países deben hacer lo mismo. Cada niño es valioso tal como es y tiene el derecho absoluto de ser protegido de una ideología radical que promueve medicamentos peligrosos y cirugías con consecuencias devastadoras.
La votación del Senado tuvo lugar tras la publicación de un informe de un comité de investigación del Congreso chileno que recomendó enérgicamente la suspensión inmediata de todos los programas relacionados con la llamada “transición de género” de los niños.
El informe investigó el programa PAIG, o Creciendo con Orgullo, una política gubernamental dirigida a los chilenos que expresaban confusión sobre “identidad de género”.
Del informe:
El PAIG se implementa en 37 hospitales del país y los pares psicosociales tienen la facultad de realizar intervenciones familiares, dentro de los espacios educativos, derivación a terapias hormonales, así como la facultad de ejercer acciones legales contra los “padres resistentes” que se oponen a la transición de género de sus hijos o buscan mayor prudencia al momento de avanzar en las diferentes etapas de la misma.
El informe revela que un total de 4.142 niños y adolescentes han ingresado o han sido tratados en el programa PAIG, “pese a la falta de consenso en la comunidad médico-científica y al retroceso en varios países europeos en la aplicación de los tratamientos”.
La ley fue aprobada en el Senado chileno el 20 de noviembre de 2024. El gobierno había comunicado que estudiaría presentar un recurso contra la enmienda ante el Tribunal Constitucional, lo que podría materializarse en las próximas semanas.