Fuente: Informe Orwell
Un grupo bipartidista de legisladores estadounidenses ha introducido un proyecto de ley destinado a contrarrestar la creciente influencia económica y geopolítica de China en el Hemisferio Occidental, mientras se busca promover la estabilidad y el crecimiento económico en la región.
Los senadores Bill Cassidy, M.D. (R-LA) y Michael Bennet (D-CO), junto con los representantes Maria Salazar (R-FL-27) y Adriano Espaillat (D-NY-13), anunciaron la presentación del proyecto de ley, denominado «Ley de las Américas», en una conferencia de prensa en Washington D.C. La iniciativa cuenta con el respaldo del presidente del Comité Selecto de la Cámara sobre el Partido Comunista Chino, Mike Gallagher (R-WI-08).
El objetivo principal de la Ley de las Américas es establecer una asociación comercial permanente entre los países del Hemisferio Occidental, con el fin de fortalecer la economía regional y reducir la dependencia de China en términos de manufactura y comercio. Además, se pretende promover la estabilidad política y el estado de derecho en la región, así como defender los valores democráticos compartidos por Estados Unidos y sus aliados en el hemisferio.
«Es hora de nivelar el campo de juego y contrarrestar la influencia perniciosa de China en nuestro hemisferio», afirmó el senador Cassidy. «La Ley de las Américas no solo promoverá el crecimiento económico y la creación de empleo en toda la región, sino que también fortalecerá nuestras relaciones con nuestros vecinos y aliados en el Hemisferio Occidental».
Por su parte, el representante Espaillat enfatizó el impacto positivo que la legislación tendría en las comunidades hispanas en Estados Unidos y en los países de América Latina y el Caribe. «La Ley de las Américas representa una oportunidad única para revitalizar nuestra relación con nuestros socios en la región y promover el desarrollo económico y social en todas las Américas», dijo.
El proyecto de ley propone una serie de medidas para lograr sus objetivos, incluida la expansión de los acuerdos comerciales existentes, como el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como la creación de incentivos fiscales y financieros para fomentar la inversión y la creación de empleo en la región. También se contempla la implementación de programas de capacitación y desarrollo de habilidades para mejorar la competitividad de la fuerza laboral en el Hemisferio Occidental.
«La influencia de China en nuestro hemisferio representa una amenaza tanto para la seguridad nacional como para la estabilidad económica», advirtió la representante Salazar. «Es crucial que actuemos de manera decisiva para contrarrestar esta tendencia y fortalecer nuestra posición en la región».
La presentación de la Ley de las Américas marca un hito en los esfuerzos de Estados Unidos por promover la cooperación y la prosperidad en el Hemisferio Occidental, mientras se enfrenta a los desafíos planteados por el ascenso de China como potencia mundial. Se espera que el proyecto de ley sea sometido a debate en el Congreso en las próximas semanas, con el objetivo de su pronta aprobación y implementación.
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