Por Cecilia Borrelli – Mundo Libre Diario
Tal como se esperaba, el presidente Javier Milei ha anunciado ayer un extenso programa de medidas de desregulación a través de un mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). Como ya lo viene anunciando a lo largo de la campaña, estaría dispuesto a recurrir a la Consulta Popular para respaldar sus decisiones en caso de enfrentarse a fuertes trabas a su aprobación, ya que confía en que tiene el respaldo de la ciudadanía.
La administración de Milei se encuentra con un estrecho margen de maniobra en el Congreso, lo que ha llevado al presidente a optar por el uso de DNU. Sin embargo, estas medidas deberán obtener el aval del Legislativo, lo que plantea desafíos considerables. La Constitución argentina establece restricciones específicas para los DNU, prohibiendo disposiciones en áreas clave como penal, tributaria, electoral o sobre partidos políticos.
El artículo 100 de la Constitución impone la revisión de los DNU por la Comisión Bicameral Permanente en un plazo de 10 días para que entre en vigencia.
Ante la resistencia potencial en el Congreso, Milei contempla la posibilidad de recurrir a la Consulta Popular no vinculante, confiando en que tiene el apoyo suficiente del pueblo como para ejercer presión sobre el Poder Legislativo.
El presidente Milei ha manifestado su disposición a defender el DNU hasta las últimas consecuencias, respaldándose en la declaración de emergencia pública que, según él, justifica la adopción de medidas extraordinarias. Su determinación se basa en consultas a asesores constitucionales, asegurando que el instrumento legal cuenta con respaldo sólido.
La herramienta de los DNU ha sido utilizada por todos los gobiernos, la asociación Directorio Legislativo revela que, hasta principios de este mes, Alberto Fernández publicó 164 DNU durante su gestión, mientras que durante el gobierno de Mauricio Macri se registraron 71. Estos datos resaltan la frecuencia e importancia de los decretos en la política argentina, siendo Néstor Kirchner el presidente que más utilizó este recurso para gobernar durante la presidencia, si se compara con otros mandatarios en el período comprendido entre julio de 1989 y enero 2019.
A pesar de las críticas y protestas surgidas en respuesta al decreto de 83 páginas y 366 medidas presentado en la noche de ayer, Milei considera que algunos de los que protestan padecen «síndrome de Estocolmo» al abrazar un modelo los vuelve más pobres, según comentó en comunicación con Radio Rivadavia esta mañana.
El presidente, consciente de los desafíos judiciales y legislativos que enfrentará tras los anuncios, ha trazado una estrategia que incluye la presentación de un paquete de tres leyes que presentará esta semana para la reforma del Estado, antes que la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo, conformada por 8 diputados y 8 senadores, trate el DNU para su aprobación. Es por esto que recientemente, el líder libertario anunció que todavía “hay más”.
Con una mirada puesta en marzo o abril, el presidente evaluará la posibilidad de convocar a una Consulta Popular no vinculante si los obstáculos persisten.
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