Por David Krayden
Traducido de thepostmillennial.com por TierraPura.org
El Servicio de Inteligencia de Seguridad de Canadá (CSIS) ha considerado que siete “comisarías o estaciones de policía” chinas que operan (ilegalmente) en todo Canadá forman parte de un “arsenal de interferencia” utilizado por China en suelo canadiense, según un informe publicado por La Presse el lunes .
Las revelaciones, de las que se habló por primera vez en diciembre de 2022 en un Alerta de Seguridad del CSIS -obtenida por el medio a través de la Ley de Acceso a la Información-, han arrojado luz sobre la capacidad del Partido Comunista Chino para ejercer influencia en Canadá.
“Las ‘comisarías o estaciones de policía’ en Canadá contribuyen a la interferencia extranjera por parte de la República Popular China”, afirmó el CSIS en el documento de 15 páginas que probablemente fue visto por altos funcionarios del gobierno liberal, incluido -presumiblemente- el primer ministro Justin Trudeau.
La redacción del documento está codificada, pero fue clara la afirmación que “cualquier interferencia extranjera debilita progresivamente la democracia canadiense, socava imperceptiblemente la cohesión social tan preciada para una sociedad multicultural y desacata los derechos garantizados por la Carta Canadiense de Derechos y Libertades. […] El CSIS continúa monitoreando la evolución de esta situación”.
El organismo de control de derechos humanos Safeguard Defenders señaló que el Ministerio de Seguridad Pública del partido comunista chino (PCCh) ha establecido estas “comisarías” en más de 50 países, incluido Canadá, con el objetivo de rastrear, intimidar, amenazar (o inclusive deportar) a los disidentes chinos (del terrorismo de estado del régimen comunista) que viven en el extranjero.
La Real Policía Montada de Canadá (RCMP) ha iniciado una investigación sobre las “estaciones de policía”, que están ubicadas en Vancouver, Toronto y Montreal. En junio, la RCMP afirmó que había “terminado con las actividades policiales ilegales en Ontario, Quebec y Columbia Británica”, pero no se mencionó ningún arresto.
El 21 de julio, un ex oficial de la RCMP fue acusado de “interferencia extranjera” que incluía espiar para China y acosar a residentes chinos en Canadá.
Trudeau ha sido acusado de ignorar los hallazgos de inteligencia del CSIS o de negar que los haya recibido. Inicialmente respondió con una negación a la crisis por la interferencia electoral china, sugiriendo que el CSIS no le informó sobre el asunto. Sin embargo, informes posteriores revelaron que el CSIS le dijo a Trudeau que China interfirió al financiar a los candidatos en Toronto.
El 1 de marzo de 2023, la asesora de seguridad nacional del Consejo Privado, Jody Thomas, dijo que el primer ministro recibió un memorando de la Oficina del Consejo Privado sobre la operación, pero añadió que no podía garantizar que él realmente lo hubiera leído.
El ministro de Seguridad Pública, Marco Mendicino, también se ha enfrentado al cuestionamiento de sus repetidas afirmaciones de que las comisarías ya no estaban funcionando. Sin embargo, como informa CBC news, muchas todavía seguían abiertas en el momento en que hizo sus declaraciones.
Global Affairs Canada admitió el 9 de agosto que China había lanzado una “red coordinada” de desinformación contra el crítico de Asuntos Exteriores Michael Chong a través de una plataforma de redes sociales chinas.
Chong y su familia fueron acosados en línea, y los ataques continuaron incluso después de que las acciones de acoso del PCCh fueran reveladas en los medios. En ese momento, el Relator Especial David Johnston estaba investigando la interferencia extranjera en el proceso electoral de Canadá. Su informe final se publicará en octubre.
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