Traducido de LifeSiteNews.com por TierraPura.org
El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, firmó el martes una proclamación en la que reclama la victoria de la nadadora que perdió ante su oponente “transgénero” William “Lia” Thomas durante una competición la semana pasada.
La noticia llega después de que la Asociación Nacional de Atletismo Colegiado (NCAA) declarara a “Lia” Thomas, estudiante de quinto año de la Universidad de Pensilvania, ganadora de la prueba de 500 yardas estilo libre femenino de la División 1 celebrada el 17 de marzo.
Thomas, un hombre que se identifica como mujer, ha destrozado récords y ha generado controversia nacional desde que empezó a competir en el equipo femenino después de nadar durante tres temporadas en el equipo masculino.
La estudiante de la Universidad de Virginia Emma Weyant quedó en segundo lugar en la competición de la NCAA del jueves, terminando a 1,75 segundos de su competidora “transgénero”. Weyant es una medallista de plata olímpica de 20 años y nativa de Florida que nadó para los Sarasota Sharks antes de unirse al equipo de natación femenino de la Universidad de Virginia.
En su proclamación del martes, DeSantis declaró que Weyant, y no Thomas, era la verdadera ganadora de la competición de estilo libre femenino, afirmando que “Florida rechaza los esfuerzos de NCAA por destruir el atletismo femenino, desaprueba que la NCAA eleve la ideología por encima de la biología y se ofende porque la NCAA intente hacer a otros cómplices de una mentira”.
“Dado que es una nativa de la Florida de Sarasota, yo Ron DeSantis, Gobernador del Estado de la Florida, declaró en la Florida que Emma Weyant es la legítima ganadora de las 500 yardas libres femeninas de la División 1 de la NCAA de 2022, la felicito por otro logro significativo y expresó el orgullo de que sea una residente de la Florida”, escribió DeSantis.
El gobernador había prometido firmar una proclama afirmando la victoria de Weyant a primera hora del día.
Durante una conferencia de prensa el martes, DeSantis, que se ha metido con frecuencia en la política nacional y ha acaparado titulares por tomar medidas contra la teoría crítica de la raza y la ideología radical de género en las escuelas, dijo a los periodistas que “Emma [Weyant] es la mejor nadadora femenina en los 500 metros libres”.
Argumentando que la NCAA ha permitido que “los hombres compitan en el atletismo femenino”, DeSantis dijo que Weyant era “la mujer número uno que terminó”.
“Ganó la medalla de plata, ha sido una absoluta superestrella durante toda su carrera”, dijo.
El gobernador del Estado del Sol, al que muchos conservadores ven como un fuerte aspirante a la presidencia en 2024, continuó afirmando que “tenemos que dejar de permitir que organizaciones como NCAA perpetúen fraudes al público y eso es exactamente lo que están haciendo”.
“Están poniendo la ideología por delante de las oportunidades para las atletas”, dijo, y añadió que cree que algunas personas “tienen miedo de hablar y decir lo que están haciendo. Pero eso es lo que están haciendo”.
“Y por eso, en Florida, vamos a ser muy claros, cuando intenten hacer cosas así, cuando intenten socavar la integridad de la competición, cuando intenten contrarrestar la capacidad de las mujeres para realizar sus sueños, vamos a hablar de ello”, dijo el gobernador.
DeSantis no ha sido el único que ha hablado en contra de la participación de Thomas en los deportes femeninos.
En una entrevista realizada esta semana, una nadadora de la Universidad de Pensilvania dijo a Fox News Digital bajo condición de anonimato que no creía que la participación de Thomas en el equipo fuera legítima porque “los récords de las mujeres están separados de los de los hombres”.
“No es necesariamente un logro en mi opinión”, dijo la estudiante anónima. “Los récords femeninos están separados de los masculinos. Es una categoría distinta porque ninguna mujer va a ser tan rápida como un hombre”.
“Estamos tirando por la borda la definición de un récord para que encaje en la agenda de otra persona de lo que debería significar para ellos cuando, en realidad, no tiene ningún sentido científico hacerlo”, añadió.
Asimismo, en una carta dirigida a la NCAA el domingo, la nadadora de Virginia Tech Reka Gyorgy dijo que había perdido su oportunidad de competir en la final frente a Thomas, y criticó a la asociación por su “falta de interés en proteger a sus atletas”.
“En todas las pruebas en las que compitió la atleta transgénero se le quitó un puesto a las mujeres biológicas a lo largo del encuentro”, dijo Gyorgy, que afirmó que “respeta y apoya plenamente a Lia Thomas”, pero que espera que “la NCAA abra los ojos y cambie estas reglas” permitiendo que los hombres que se identifican como mujeres compitan contra las mujeres.
Mientras tanto, antes de la publicación de la declaración de Gyorgy, un grupo de padres de nadadores de la Ivy League escribió un artículo de opinión anónimo en el New York Post en el que argumentaban que Thomas y otros atletas masculinos que se identifican como mujeres han “robado a miles de mujeres un trato justo en el deporte”.
No es la primera vez que DeSantis toma medidas para combatir la ideología transgénero en el deporte.
El año pasado, DeSantis firmó la Ley de Equidad en el Deporte Femenino, que prohíbe a los hombres que se identifican como mujeres participar en los deportes femeninos. Según la ley, cualquier persona cuyo certificado de nacimiento indique que es varón no podrá competir contra las mujeres en los deportes desde la escuela secundaria hasta la universidad.
“Pensamos que era muy importante que las niñas y las jóvenes atletas del estado de Florida tuvieran la posibilidad de trabajar duro, de realizar sus sueños y de competir limpiamente”, dijo DeSantis el martes. “Ya sea en la natación, en el atletismo, lo que sea”.
Al menos 37 estados han introducido medidas que restringen a los hombres de competir en deportes femeninos, 11 de los cuales han aprobado las prohibiciones propuestas como ley.
El gobernador republicano de Idaho, Brad Little, fue el primer gobernador estatal en prohibir que los hombres compitan en deportes femeninos, haciéndolo con la firma de la ley HB 500 en marzo de 2020.
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