Fuente: Derecha Dirario.
En una sorpresiva cadena nacional alrededor de las 6 am (hora de Moscú), el presidente ruso Vladimir Putin le declaró la guerra este jueves por la mañana a la República de Ucrania, poniendo fin a semanas de estancamiento diplomático y hundiendo a Europa del Este en una pesadilla de violencia y derramamiento de sangre que no se veía desde los días más oscuros de la Segunda Guerra Mundial.
El líder ruso afirmó que Rusia llevaría a cabo una “operación militar especial” para desmilitarizar Ucrania, y terminar con “las hostilidades” del Estado de Ucrania contra las “repúblicas independientes” de Donetsk y Lugansk.
Sin embargo, inmediatamente después del discurso televisado, Rusia inició una invasión a gran escala de Ucrania. Tan solo 10 minutos después de que se terminara la transmisión, se reportaron explosiones en Kramatorsk, y disparos de artillería en Járkov, Odesa, Mariúpol y la capital, Kiev.
Putin dijo que el Kremlin no tiene intención de ocupar el país, pero sí quedarse “el tiempo necesario” para garantizar la seguridad de las “víctimas” de este conflicto, las dos repúblicas auto-proclamadas de la región del Donbas.
De todos modos, el senador estoadunidense Marco Rubio, vicepresidente del Comité de Inteligencia del Congreso, aseguró que la Casa Blanca informa que Rusia lanzó un ataque aéreo contra el aeropuerto de Kiev para invadir por aire; además de un ataque anfibio contra la ciudad-puerto de Mariúpol, para invadir por agua.
Por último, las tropas entrarán por la región del Donbas, al este de Ucrania, para completar la invasión terrestre y ocupar todo el país, desde la capital hasta Crimea.
En su discurso, Putin aseguró que “los habitantes de Crimea y Donbas decidieron en 2014 regresar a su patria histórica”, en referencia a la gran cantidad de ucranianos de etnia rusa en esas zonas.
Y lanzó una brutal advertencia contra Estados Unidos y la OTAN: “A cualquiera que considere interferir desde el exterior: si lo hace, enfrentará consecuencias mayores que cualquiera que haya enfrentado en la historia. Se han tomado todas las decisiones relevantes. Espero que me escuchen…“, aparentemente amenazando con una guerra nuclear si deciden interferir.
La Casa Banca emitió un comunicado poco después de que comenzara la acción militar en nombre del presidente Joe Biden, calificando la agresión como “un ataque no provocado e injustificado” por parte de Rusia.
“El presidente Putin ha elegido una guerra que traerá una pérdida catastrófica de vidas y sufrimiento humano“, disparó en el comunicado.