Fuente: La Derecha Diario
En un insólito anuncio del jefe de Gabinete de Larreta, Felipe Miguel, el gobierno porteño confirmó que empezará a detectar casos de COVID-19 positivo a través de un programa de inteligencia artifical que analizará audios enviados por WhatsApp de personas tosiendo.
La infección por coronavirus se puede manifestar a través de múltiples síntomas, como tos, fiebre alta, dificultad respiratoria, fuerte dolor de garganta, pérdida repentina del gusto o del olfato, y ahora la variante ómicron a través de dolor de cabeza, dolor muscular, diarrea, vómitos, y congestión nasal.
Basándose en esto, el Gobierno porteño asegura haber desarrollado una inteligencia artifical que se incorporará a Boti, el WhatsApp automatizado de la Ciudad (11-5050-0147), llamado IATos, que puede detectar con un 86% de eficacia si un caso es sospechoso de COVID y requiere de hisopado solamente por escuchar un audio de la tos del paciente.
La funcionalidad resulta extraña y carece de estudios que la respalden. Según informes de otros países, si bien la tos del COVID-19 suele ser seca, o sea que no libera mucosa o flema, este tipo de síntoma coincide con otras enfermedades no relacionadas al SARS-CoV-2, como gripes de otros virus, asma, alergias, reflujo gastroesofágico o irritación por factores ambientales.
Además, incluso si se pudiera identificar un COVID-19 por el espectro de sonido de una tos, la gran mayoría de los casos actualmente corresponden a la variante ómicron, que generalmente se ubica en el tracto respiratorio superior y no genera tos.
Lo hará a través de Boti, el chat para consultas del Gobierno porteño, que asegura haber desarrollado un sistema de inteligencia artificial para identificar si el sonido corresponde a una persona que pueda tener la infección.
En un insólito anuncio del jefe de Gabinete de Larreta, Felipe Miguel, el gobierno porteño confirmó que empezará a detectar casos de COVID-19 positivo a través de un programa de inteligencia artifical que analizará audios enviados por WhatsApp de personas tosiendo.
La infección por coronavirus se puede manifestar a través de múltiples síntomas, como tos, fiebre alta, dificultad respiratoria, fuerte dolor de garganta, pérdida repentina del gusto o del olfato, y ahora la variante ómicron a través de dolor de cabeza, dolor muscular, diarrea, vómitos, y congestión nasal.
Basándose en esto, el Gobierno porteño asegura haber desarrollado una inteligencia artifical que se incorporará a Boti, el WhatsApp automatizado de la Ciudad (11-5050-0147), llamado IATos, que puede detectar con un 86% de eficacia si un caso es sospechoso de COVID y requiere de hisopado solamente por escuchar un audio de la tos del paciente.
La funcionalidad resulta extraña y carece de estudios que la respalden. Según informes de otros países, si bien la tos del COVID-19 suele ser seca, o sea que no libera mucosa o flema, este tipo de síntoma coincide con otras enfermedades no relacionadas al SARS-CoV-2, como gripes de otros virus, asma, alergias, reflujo gastroesofágico o irritación por factores ambientales.
Además, incluso si se pudiera identificar un COVID-19 por el espectro de sonido de una tos, la gran mayoría de los casos actualmente corresponden a la variante ómicron, que generalmente se ubica en el tracto respiratorio superior y no genera tos.
“Es un paso adelante en el desarrollo de inteligencia artificial, se trata de una herramienta para clasificar sonidos de voz, de respiración y de la tos. A partir de esta incorporación en Boti, vamos a ofrecer a los ciudadanos la posibilidad de saber si es conveniente que se hagan un hisopado o no”, explicó Miguel, quien generó polémica por un tweet mal redactado.
“CABA ya detecta posibilidad de contagio de coronavirus por audios de WhatsApp“, fue lo primero que puso en redes antes de que saliera la noticia. En un primer momento, usuarios creyeron que el anuncio signficaba que estarían escuchando audios de WhatsApp sin el consentimiento de la gente, algo que el funcionario tuvo que salir rápidamente a esclarecer.
“Muchos casos son asintomáticos y pueden quedar afuera de la decisión de testearse, la gran ventaja es la simplicidad de Boti, esto se puede hacer desde casa, sin la necesidad de movilizarse”, agregó, nuevamente sin mucho sentido, ya que los casos asintomáticos no presentan tos.
Cuando una persona consulta en Boti y elige la opción “tengo síntomas de COVID-19″, como parte del proceso de triage, para conocer si la persona tiene síntomas o si fue contacto estrecho de un caso confirmado, ahora la persona va a poder grabar y enviar un audio con su tos.
“La tos genera una resonancia diferente en quienes cursan la infección por COVID-19“, explicó el subsecretario de Planificación Sanitaria, Daniel Ferrante, sin presentar las pruebas correspondientes.
Ferrante aseguró que se “entrenó” al robot con 140.000 muestras del patrón sonoro de distintas personas con COVID, y si bien los resultados no fueron tan conclusivos como deberían, resultó un “buen” método para recomendación de testeo, pero que “no es un método de diagnóstico”.
¿Cómo fue el proceso para recabar 140.000 muestras de tos? Según contó Ferrante, en los últimos meses cuando Boti enviaba el resultado del test PCR positivo, se les preguntó si querían grabar un audio, y luego con ese material se hizo la base de datos del sistema IATos.
En una prueba preliminar, “sobre un total de 2.687 audios evaluados, IATos recomendó realizarse el testeo a 554 personas. De esas 554 personas, 436 resultaron positivas en su hisopado y 118 fueron negativas”, explicó el secretario de Innovación y Transformación Digital de la Ciudad, Diego Fernández. Este proceso fue aprobado por el Comité de Ética del Hospital Elizalde, pero no fue corroborado por pares ni las muestras fueron hechas públicas.
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