Traducido de LifeSiteNews.com por TierraPura.org

El abogado ciego que escapó de China en 2012, dijo que el boicot diplomático a los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 está “lejos de ser suficiente”.

Un sistema de crédito social al estilo comunista chino está “sucediendo en nuestras puertas ahora en los Estados Unidos y en Europa”, dijo Chen Guangcheng, el abogado ciego de derechos humanos y disidente abierto que escapó de China en 2012.

Además del actual régimen de aborto forzado en China, en el que se ha relajado la “Política de un solo hijo” y se permite a las parejas casadas tener tres hijos, pero “el Partido Comunista todavía puede obligar a abortar” a cualquiera de sus ciudadanos, deberíamos prestar atención al “uso de la tecnología occidental por parte del Partido Comunista chino para crear sus redes de sistemas de reconocimiento de movimientos y sistemas de reconocimiento facial que utilizan para controlar a la población.”

Esto, combinado con el “número de salud” que se exige a cada ciudadano, permite al PCCh un control total sobre la vida de sus ciudadanos, advirtió Chen.

“Antes, si un activista iba a participar en algo y el Partido Comunista Chino quería impedirle salir o impedirle participar en algo, enviaba a un grupo de matones para que fueran a impedirlo”, explicó. “Pero ahora, lo que pueden hacer es en un ordenador, pueden cambiar el estado, el estado de vacunación u otra información sanitaria, para hacer que ni siquiera puedan comprar un billete de avión o de tren para ir a algún sitio”.

“En los últimos dos años, la capacidad del Partido Comunista Chino para controlar a la población a través de esta tecnología se ha disparado”.

El escenario distópico que ahora es una realidad para 1.400 millones de personas en China es incipiente en Occidente, advirtió Chen: “Eso no es sólo algo que deba preocuparnos en China bajo el Partido Comunista Chino. Creo que podemos ver que está ocurriendo a nuestras puertas ahora en Estados Unidos y en Europa”.

La advertencia de Chen se produce en un momento en que muchas ciudades estadounidenses exigen a las personas que presenten una prueba de vacunación contra el COVID-19 para entrar en restaurantes u otros establecimientos públicos, a menudo en forma de código QR o a través de una aplicación de salud digital, y en el que se habla cada vez más de las puntuaciones “medioambientales, sociales y de gobernanza” (ESG) que miden la “sostenibilidad” y la “justicia social” de personas e instituciones.

El famoso activista de los derechos humanos Chen Guangcheng es muy conocido en los círculos de derechos humanos de todo el mundo. Su histórica demanda colectiva contra el PCCh por su política de un solo hijo y sus críticas a los abusos de los derechos humanos en China lo llevaron a la cárcel del PCCh y luego a un arresto domiciliario, del que acabó escapando.

La fuga de Chen, detallada en su libro de 2016 The Barefoot Lawyer: The Remarkable Memoir of China’s Bravest Political Activist, incluye la evasión de los guardias apostados alrededor de su casa, la rotura de un pie escalando un muro y teniendo que arrastrarse literalmente hasta un pueblo vecino, y una persecución en coche por las calles de Pekín. Consiguió llegar a la embajada estadounidense y él y su familia huyeron a Nueva York.

El largo currículum de Chen incluye su paso por la Universidad de Nueva York de 2012 a 2013 y su trabajo actual como investigador visitante en la Universidad Católica de América, investigador principal distinguido en derechos humanos en el Instituto Witherspoon y asesor principal distinguido de la Fundación Lantos para los Derechos Humanos y la Justicia.

Chen habló en la Convención Nacional Republicana de 2020 (RNC), elogiando al entonces presidente Trump por enfrentarse a China y expresando su gratitud “al pueblo estadounidense por acogerme a mí y a mi familia en Estados Unidos, donde ahora somos libres”.

El peligro de convertirnos en esclavos

Chen dijo que el boicot diplomático a los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 está “lejos de ser suficiente”.

“El Partido Comunista es una organización mafiosa que ha secuestrado y controlado completamente a todo el país”, dijo. “La idea de que las naciones occidentales cooperen con este gobierno, que participen en este tipo de eventos, es vergonzosa”.

“Aunque Estados Unidos ha dicho públicamente que está haciendo un boicot diplomático, al final ha enviado a 18 funcionarios del gobierno a los juegos”, añadió. “Así que siento que esto es… una especie de engaño al pueblo estadounidense y que va en contra de Estados Unidos, de los valores estadounidenses”.

Chen hizo un llamamiento a “una alianza de países democráticos” para que se unan y “descubran cómo eliminar” el régimen del PCCh. “Las garras del Partido Comunista Chino se han extendido a todos los ámbitos de otros países”, dijo. “El coronavirus es un ejemplo perfecto de ello. Ha cambiado nuestra forma de vida”.

Dijo que las respuestas al coronavirus basadas en la respuesta de la China comunista al virus eran un error.

Si en Occidente “empezamos a hacer las cosas de acuerdo con la forma en que… el Partido Comunista Chino está haciendo las cosas, entonces estamos limitando las libertades de la gente y nos estamos volviendo como ellos y corremos el peligro de convertirnos en esclavos”.

Guangcheng también criticó los duros mandatos de la vacuna COVID-19 que se están aplicando en muchos países occidentales.

“Creo que, en un momento en que las vacunas no han sido completamente probadas, empezar a obligar a todo el mundo a ponérselas no es correcto”, explicó. “Y cuando no sabemos si hay algún daño residual que pueda provenir de las vacunas.

Debería depender de cada persona el hecho de recibir las vacunas, dijo.

Además, “hay muchos efectos secundarios potenciales de las vacunas de los que no se ha hablado en los medios de comunicación, que tienen que ver con coágulos de sangre y otras cosas. Creo que no hablar de eso es una especie de propaganda: es engañoso. Y no acepto este tipo de autocensura de los medios de comunicación que está ocurriendo”.

Chen subrayó que la falta de respuestas sobre el origen del virus supone el riesgo de más enfermedades: “Lo que más quiero subrayar es que si no investigamos los orígenes de este virus, si no llegamos al fondo de la cuestión, en Occidente tendremos innumerables virus de este tipo que se sucederán”.

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