Traducido de RedStatenation.com por TierraPura.org

Hay una nueva ley propuesta en Carolina del Sur que prohibiría a los empleadores preguntar a los empleados sobre su estado de vacunación o se enfrentarían a penas de cárcel.

Según la nueva ley propuesta, incluso el mero hecho de preguntar si alguien está vacunado podría considerarse un delito menor. Los que están a favor lo llaman un proyecto de ley de “no preguntar”.

“El gobierno no tiene derecho a obligarte o decirte que te vacunes, ni a amenazarte si no lo haces”, dijo el representante del norte del estado William “Bill” Chumley (R, Distrito 35), uno de los copatrocinadores del proyecto de ley.

El proyecto de ley H.4848 de la Cámara de Representantes se dirige ahora a un comité después de haber sido presentado hace apenas unos días. Dice así:

“No obstante otra disposición de la ley en sentido contrario, cualquier empleado, funcionario, agente u otro representante de una entidad pública, sin fines de lucro o privada que pregunte sobre el estado de vacunación contra el COVID-19 de cualquier estudiante, empleado, miembro o cualquier otra persona que busque ser admitida en las instalaciones de la entidad es culpable de un delito menor y, en caso de condena, debe ser multado por no más de catorce mil dólares o encarcelado por no más de un año, o ambos”, dice.

La legislación es algo que el representante Chumley califica de “cuestión de libertad y protección del empleo”.

“Carolina del Sur no quería meterse en esta lucha”, dijo Chumley Todd a FOX Carolina. “Nos la trajo el gobierno federal”.

Chumley dice que la culpa de gran parte de la actual escasez de mano de obra es por los mandatos de vacunas, y dice que él y otros que propusieron esta ley lo hicieron para enviar un mensaje.

“Los estados tienen derecho a imponer ciertas leyes si quieren, y a no imponer otras que consideramos inconstitucionales”, dijo.

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