Fuente: La Derecha Diario
El pasado jueves 30, el Dr. Robert Malone, co-creador de la tecnología de vacunas de mRNA (ARN mensajero) en la década de los ’80, dio una entrevista de más de tres horas en el podcast de Joe Rogan como invitado.
En el programa contó su historia de vida. En 1987, como investigador del Instituto Salk, fue el primer científico en transfeccionar ácido ribonucleico (ARN) tanto en ratas como en humanos. En otras palabras, fue el primero en lograr introducir material genético externo en células humanas, dando inicio a la tecnología de ARN mensajero.
Con todo este historial, Malone se convirtió en una eminencia del mundo de la virología en la década del 90, trabajando con múltiples farmaceúticas y con agencias del Estado. Sin embargo, fue relegado al ostracismo en el último año cuando salió a criticar las vacunas de ARN mensajero de Pfizer, a pesar de que es la persona que más sabe de esta tecnología del mundo.
Tan solo un día antes de aparecer en el programa, Twitter bloqueó su cuenta por haber expresar estas críticas. Al día siguiente de aparecer en el programa de Joe Rogan, el video fue removido de YouTube. Por suerte, otros usuarios descargaron y re-subieron el video. También contó que su usuario de LinkedIn fue suspendido hace algunos meses.
En la entrevista, el Dr. Malone explicó que nunca se le hubiera ocurrido que por hablar de sus conocimientos científicos en una red social iba a ser censurado. Entre otras cosas, dijo que la vacuna de Pfizer debería haber pasado por muchas más etapas de testeo antes de ser liberada al público, especialmente porque usa la tecnología de ARN mensajero, que nunca había sido usada en vacunas para la población masiva.
Las vacunas de ARNm de Pfizer y Moderna engañan al cuerpo haciéndolo creer que está contagiado del virus, y lo obliga a producir proteínas que fomentan la creación de anticuerpos contra el SARS-CoV-2. Pero según el Dr. Malone, estas proteínas pueden ser dañinas, especialmente en los más jóvenes o los deportistas de alto rendimiento, y pueden provocar daños permanentes en los órganos críticos del cuerpo.
También contó que desde su censura, estuvo investigando el trasfondo de la cuestión. Entre otras cosas, encontró que uno de los directores del medio Reuters, que prácticamente todas las redes sociales usan como “fact-checker”, es también uno de los directores de Pfizer.
“Lo que más me importa a mí es que la gente tenga acceso a toda la información y pueda tomar su propia decisión. Pero con esta vacuna, dicen que si la gente tiene acceso a toda la información, se desincentiva a dársela, entonces hay censura“, aseguró.
“Ahora dicen que soy un mentiroso, y que yo no inventé esta tecnología, a pesar de que soy el que tengo la patente. Nadie puede debatir esto. Yo jugué un importante papel en la creación de esta tecnología y prácticamente todas las demás voces que tienen ese trasfondo, tienen conflictos de intereses, conflictos de intereses financieros. Creo que soy el único que no lo hace, no estoy obteniendo dinero de esto“, agregó.
Malone contó que en febrero del 2020, fue una de las primeras personas en contagiarse del coronavirus, ya que había estado en una conferencia global de virología, y había varias personas que venían de Wuhan. Tuvo un caso muy severo en aquél entonces, y solo mejoró cuando tomó pepcidina (famotidina).
Desde entonces, con una de las empresas farmaceúticas que trabaja, está desarrollando un medicamento en base a la famotidina para tratar los casos de COVID-19, que esta semana fue aprobada por la FDA.
Contó que también trató de desarrollar un medicamento en base a ivermectina e hidroxicloraquina, dos drogas que han ayudado mucho a pacientes de COVID-19 en todo el mundo, pero después de 2 años tratando, la FDA no se los aprobó. Según él, por motivos políticos.
Después de este caso, se vacunó contra el coronavirus con la vacuna de Moderna, por protocolo de la empresa que trabajaba para poder viajar a Francia en medio de las cuarentenas de 2020. Según cuenta, tras la segunda dosis de la vacuna, desarrolló un caso grave de hipertensión. “Estos son todos casos adversos del ARN mensajero, especialmente para las personas que ya tuvieron la enfermedad y poco después se vacunan con esta tecnologia“, aseguró.
Pocos meses después, cuenta que se volvió a contagiar, esta vez con un caso más leve. “No me sorprende haberme contagiado tantas veces, viajé por todo el mundo en medio de una pandemia”, bromeó.
“Más de medio millón de seguidores que tenía se fueron en un abrir y cerrar de ojos. Esto significa que perdimos un componente crítico en nuestra lucha para detener que las vacunas sean obligatorias para los niños y para detener la corrupción en nuestros gobiernos, así como en el complejo médico-industrial y las industrias farmacéuticas“, concluyó el Dr. Malone.