Fuente: El American
Las autoridades de Nueva York van a gastar 65 millones de dólares en los distintos barrios y condados del estado para hacer cumplir la obligatoriedad de la mascarilla, vigente en espacios cerrados desde el 13 de diciembre.
“Vamos a luchar, no nos vamos a rendir a la pandemia”, aseguró la gobernadora Kathy Hochul a los neoyorquinos en una conferencia de prensa.
El reparto de 65 millones surge después de que representantes de los condados señalaran que no cuentan con los fondos para hacer valer la orden de la gobernadora, que estará vigente hasta el 15 de enero y supondrá sanciones civiles y penales, con una multa máxima de 1.000 dólares por cada violación, para lo cual habrá que desplegar agentes de salud, dijo Hochul.
La medida abarca lugares de entretenimiento cubiertos, salas de conciertos, estadios deportivos cubiertos, espacios recreativos, restaurantes, edificios de oficinas, centros comerciales, tiendas de comestibles, farmacias, lugares de culto y áreas comunes en edificios residenciales.
La gobernadora, al igual que lo hizo hoy el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, dijo que esta será una situación de corto plazo, cuando ya el mundo está por entrar en el tercer año de la pandemia.