Por Carlos Esteban – La Gaceta de la Iberoesfera
El expresidente Donald Trump ha vuelto a insinuar que se presentará a las elecciones presidenciales de 2024 ante Bill O’Reilly, de la Fox y, aunque no ha querido comprometerse dando el nombre de quien podría ser su elegido como candidato a la Vicepresidencia, ha reconocido que DeSantis, el gobernador de Florida que mantiene una rebelión soterrada contra la Administración Biden, «es alguien que me gusta un montón».
Fue en Orlando, Florida, ante una multitud que le aclamaba en el Amway Center. Allí le confesó a O’Reilly su deseo, insistiendo como no ha dejado de hacerlo en el ‘robo’ de las pasadas elecciones: “Ganamos la primera vez, y la segunda todavía por más. Y tiene toda la pinta de que podríamos tener que plantearnos muy seriamente una tercera vez», aseguró.
Trump está llevando a cabo una gira histórica y Orlando es la segunda parada. Empezó también en Florida, su segundo hogar, en una localidad de afortunado nombre, Sunrise, y luego continuará con otras dos paradas en Texas. No es casual, naturalmente, que ambos estados estén presentando una resistencia heroica a las medidas tiránicas e inconstitucionales que la Administración Biden quiere imponer sobre la pandemia y el trágala de la Teoría Racial Crítica en las escuelas.
O’Reilly trató de llevarle al huerto y que diese un nombre como su compañero de tándem electoral, pero el neoyorquino se zafó con seguridad: «Todo lo que puedo decir es que la gente va a estar muy satisfecha con lo que voy a hacer». No cejó O’Reilly, como un perro de presa, ofreciendo el nombre del gobernador del estado que les albergaba, el también republicano Ron DeSantis. Y, aunque tampoco cayó en esta celada, reconoció Trump al menos que DeSantis le gusta «un montón».
Y cada día a más gente entre las filas de la resistencia al dominio globalista y woke. DeSantis ha convertido su estado en un territorio ‘libre de wokismo’, apurando las competencias que le concede la estructura federal para contrarrestar las restricciones contra el covid o las medidas permisivas con la inmigración ilegal que emanan de Washington. Eso le ha hecho enormemente popular entre los opositores al régimen, especialmente porque los resultados de sus políticas son perfectamente visibles.
Trump ha llegado a reconocer a lo largo de su gira que DeSantis sería una buena elección como compañero de tándem electoral. En Business Insider confiesa que «creo que Mike [Pence] ha quedado tocado por lo que pasó el 6 de enero. Creo que está mortalmente herido, francamente». Pence ha sugerido recientemente que podría presentar su propia candidatura a las primarias para las presidenciales del 2024, aunque no se nos ocurre quién podría votarle.
Hay, sin embargo, un problema, un gran problema. Trump trasladó oficialmente su domicilio de Nueva York a Florida en 2019 y se empadronó allí. Y el Artículo II de la Constitución prevé que puedan no tenerse en cuenta los votos electorales de un estado si los dos candidatos del tándem residen en él, y eso son 30 de los que no se pueden prescindir.