Fuente: La Derecha Diario
En una de las acciones del FBI que más pone en duda la verdadera libertad de prensa en Estados Unidos, el sábado pasado, la agencia policial federal allanó la casa de James O’Keefe, periodista fundador del grupo investigativo Project Veritas, famoso por sus cámaras ocultas.
La redada del FBI fue ordenada por la Casa Blanca, haciendo valer leyes antiterrosimo de dudosa constitucionalidad, porque O’Keefe tenía en su posesión una copia del diario personal de la hija del presidente Joe Biden, Ashley.
La casa de O’Keefe en el condado de Westchester, Nueva York, fue allanada violentamente y sin previo aviso a las 6 am el sábado pasado, donde policías del FBI tiraron abajo la puerta de su casa, rompieron muebles, confiscaron teléfonos celulares y computadoras. O’Keefe dice que estuvo esposado en ropa interior en un pasillo mientras casi una docena de agentes, uno con un ariete, buscaban el diario personal, sin éxito.
“El uso por parte del Departamento de Justicia de una orden de registro para incautar las notas de un periodista y el producto del trabajo viola décadas de un precedente establecido en la Corte Suprema“, escribió el abogado de O’Keefe, Paul Calli, a los fiscales que dieron el visto bueno a la redada.
El diario incriminatorio de la hija del presidente
Según relata O’Keefe, el año pasado se le acercó un grupo de personas que querían entregarle una copia de lo que ellos proclamaban era el diario personal de la hija del presidente Joe Biden. Un diario que Ashley Biden mantuvo durante muchos años de su adolescencia.
Como no pudieron corroborar la veracidad de este material, O’Keefe decidió no publicarlo. Sin embargo, ahora que Biden llegó al poder, ordenó a su Departamento de Justicia que investigara el robo de este diario y la distribución ilegal de sus fotocopias, prácticamente confirmando que este material es verídico. Incluso con esta confirmación tácita, O’Keefe tampoco publicó el diario.
Ahora, O’Keefe y varios periodistas asociados a Project Veritas están procesados en una causa que inició el Departamento de Justicia en la Oficina del Distrito Sur de Nueva York, por la posesión ilegal de este material, pero muchos juristas aseguran que no hay leyes protegiendo la información escrita en un diario personal, y si son fotocopias y no el diario original, no hay nada que la justicia pueda hacer contra O’Keefe mientras no sea publicado.
Tras la redada, y la confirmación total de su veracidad, fotos del diario han sido filtradas a los medios de comunicación por el grupo MarcopoloUSA. En las imagenes, se entiende por qué Joe Biden está desesperado por evitar que este diario sea publicado en su totalidad.
En algunos de los pasajes del diario, se lee a Ashley Biden diciendo que es una adicta al sexo y a las drogas pesadas. Cuenta que de muy chica tenía relaciones sexuales con sus amigas de la escuela, y revela que fue abusada sexualmente en su niñez, aunque no da indicios de quién pudo haber sido.
En otra parte, asegura odiar profundamente a su padre, y cuenta que tomaba duchas con su padre (Joe Biden) a una edad en la que al mismo tiempo tenía sexo con los compañeros de escuela.
Este es el extracto más polémico del diario, y muchos especulan que era la razón por la que la Casa Blanca quería evitar que esto saliera a la luz.
Siempre se supo que la relación de Ashley Biden con sus padres era muy particular, con varias peleas durante la vicepresidencia de su padre, que hicieron que no viva junto a ellos en la residencia de gobierno. Sin embargo, ahora que es el máximo mandatario, la relación intrafamiliar está más blindada que nunca.
Hacia el final de diario, se describe con palabras y en diferentes categorías. Donde bajo “Penuria/Traumas” asegura haber sufrido bullying en la escuela, señala un hecho traumático con su padre cuando era “más joven”, otro con un chófer de colectivo, marca la muerte de su hermano Beau.
Además, asegura haber sido “violada” más “varios encuentros sexuales abusivos”, y múltiples instancias de abuso verbal, probablemente de sus familiares.
En el diario también asegura haberse sentido “santurrona” cuando ocurrió el “fiasco entre Hallie y Hunter”, en referencia al escándalo que ocurrió en su familia cuando su otro hermano Hunter, fue descubierto teniendo relaciones sexuales con Hallie, la viuda de Beau.