Fuente: Primer Informe
Un video de la Dirección General de Contrainteligencia Militar de Nicolás Maduro revela cómo ese organismo represor emplea el software de la empresa israelí Cellebrite para hackear teléfonos móviles.
A pesar de que esa empresa lo ha negado de forma vehemente, un pequeño clip compartido por la cuentas de Twitter Cazadores de Fake News, confirma que la dictadura chavista tiene acceso al avanzado sistema UFED, empleado para espiar.
En el video se escucha el testimonio de un agente del DGCIM identificado como «Rubén», quien se desempeñaría en el área de «informática forense».
«Contamos con diversidad de equipos para realizar extracciones de información en dispositivos electrónicos. Entre ellos, nuestro fuerte es el equipo UFED, de origen israelí», dice el efectivo.
Niega la relación con Venezuela
Cuando fue confrontada por proveer sus productos a la dictadura chavista la empresa contestó: “Cellebrite no ha trabajado con clientes de la defensa o la policía en Venezuela durante varios años y no cambiará su política con respecto al país mientras el régimen actual se mantenga en el poder”.
Cellebrite ha capturado una parte importante del mercado forense móvil. Trabaja con fuerzas policiales, agencias gubernamentales y empresas privadas de todo el mundo.
Les provee hardware y software que permiten extraer información de la mayoría de los dispositivos portátiles. La efectividad de esta tecnología se comprueba en casos donde los datos se han cifrado, eliminado o cargado a la nube.
También hay denuncias de que vende sus equipos al régimen del Partido Comunista Chino en su intento por reprimir a los manifestantes prodemocráticos en Hong Kong. También lo vendería a la dictadura de Bielorrusia.
¿Violación de sanciones?
Después del asesinato del Capitán Acosta Arévalo en 2019, el Departamento del Tesoro sancionó a la DGCIM. La medida complicaría para cualquier empresa que mantenga negocios con Estados Unidos entrar en un trato comercial con el cuestionado organismo de represión chavista.
EEUU ha prohibido que Maduro adquiera tecnología aplicable en el ámbito militar. En los últimos días de la administración de Donald Trump, el expresidente bloqueó el acceso del régimen venezolano a tecnología militar estadounidense.
La Oficina de Industria y Seguridad (BIS, en inglés) del Departamento de Comercio estadounidense impuso nuevos controles para evitar que su tecnología caiga en las manos equivocadas.
Esa medida apuntó a los aparatos de inteligencia militar extranjera. Entre ellos, tampoco podrá venderse tecnología estadounidense al DGCIM.
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