Traducido de TheExpose.uk por TierraPura.org

Las vacunas Covid-19 están perjudicando desproporcionadamente a los chicos más que a las chicas, ya que las inyecciones son seis veces más dañinas para los varones en comparación con las mujeres, al menos en lo que respecta a los eventos cardiovasculares.

Las investigaciones demuestran que los chicos adolescentes tienen un 600% más de probabilidades de sufrir un infarto o problemas de salud tras recibir la vacuna Covid en comparación con las chicas adolescentes de la misma edad.

Los datos de Estados Unidos confirman ahora que el grupo de mayor riesgo de sufrir un “evento adverso cardíaco” tras la inyección son los chicos de entre 12 y 15 años.

Mientras tanto, el profesor Chris Whitty, jefe médico del Reino Unido, y el Comité Conjunto de Vacunación e Inmunización (JCVI) han llegado a la conclusión de que el “margen de beneficio” en la administración de vacunas a los niños de 12 a 15 años “se considera demasiado pequeño”.

No hay ninguna razón científicamente válida para administrar a los niños pequeños las vacunas Covid, y más aún si se tiene en cuenta cómo los niños se han visto perjudicados por estas vacunas. La vacuna de Pfizer, ha sido aprobada para uso de emergencia en niños en países como Estados Unidos, y  el 86% de los niños inoculados en este país sufrieron un evento adverso que iba de leve a grave durante los ensayos.

Aunque se ha decidido que las vacunas Covid no deben utilizarse en los niños del Reino Unido, el Secretario de Sanidad, Sajid Javid, está a favor de poner las vacunas experimentales en los brazos de los niños. En su opinión, Escocia, Gales e Isla del Norte deberían “considerar la vacunación de los niños de 12 a 15 años desde una perspectiva más amplia”.

Dijo Javid: “Voy a considerar el consejo de los jefes médicos, basándome en la recomendación del JCVI, antes de tomar una decisión en breve”.

Un equipo de investigadores de la Universidad de California realizó recientemente una investigación sobre la tasa de miocarditis, inflamación del corazón y dolor en el pecho en niños de 12 a 17 años tras la segunda dosis de la vacuna. Los datos encontrados se compararon con los de los niños del mismo grupo que necesitaron hospitalización tras dar “positivo” al virus.

La Dra. Tracey Hoeg y sus compañeros de investigación descubrieron que los niños inyectados, especialmente los varones, tienen una evolución mucho peor que los que no se vacunan.

Los niños de 12 a 15 años son los que peor lo pasan, seguidos por los de 16 a 17 años. Después, las niñas de 12 a 15 años son las siguientes en sufrir problemas cardíacos.

A pesar de los resultados de esta impactante investigación, los expertos en salud continúan impulsando la agenda de las vacunas en todo el mundo, con la vista puesta en los niños, sin tener en cuenta las millones de personas que están sufriendo reacciones adversas causadas por las inyecciones.

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