Por Rodrigo Saldarriaga – gaceta.es
Evo Morales se reunió con Pedro Castillo para comprometer al Perú en su proyecto “América Plurinacional”, un plan impulsado por movimientos indígenas, sociales e intelectuales asociados al comunismo bolivariano desde el foro Runasur, una iniciativa del expresidente de Bolivia para imponer su proyecto político en el continente.
Morales, quien permanece en Lima desde el martes 10 de agosto y goza de escolta policial gracias a una solicitud del canciller Héctor Béjar -exguerrillero y castrista-, aseguró este domingo en Twitter que el proyecto presentado a Castillo es “de los pueblos para los pueblos”, en reemplazo de “América para los americanos”, una frase que expresa la Doctrina Monroe, pensamiento que establecía que cualquier intervención de las potencias europeas en el continente americano debía ser vista como un acto de agresión que requeriría la intervención de los Estados Unidos.
De acuerdo con el exmandatario boliviano, con “América Plurinacional” se plantea una oposición al intervencionismo y la injerencia, haciendo énfasis en la defensa de los recursos naturales, la redistribución de la riqueza y la solidaridad de los pueblos, rechazando además el capitalismo y el consumismo “por ser un sistema fallido que provoca desigualdad, muerte y destrucción”, como señala el punto número 5 del decálogo de Runasur, presentado el pasado 2 de agosto.
Persona no grata
Este jueves 12 de agosto, la bancada legislativa de Avanza País (centroderecha) presentó una moción de orden del día para declarar persona no grata a Morales “por su inaceptable y constante intromisión en la política nacional de nuestro país”.
Además, dispusieron que se le debe exhortar para que se abstenga de realizar comentarios sobre la política nacional peruana, pues consideraron que se trata de una “injerencia inaceptable”.
Morales, que volvió a Lima para participar en un foro organizado por la Federación Nacional de Trabajadores en la Educación del Perú (Fenate-Perú) -gremio fundado por Castillo que ha sido cuestionado por haber nombrado a miembros del Movadef, grupo fachada de la organización terrorista maoísta Sendero Luminoso, en su comité ejecutivo-, respondió que si la “derecha racista y fascista” lo declaraba persona no grata, entonces estaba “en buen camino”.
“Si la derecha racista y fascista nos declara persona no grata quiere decir que estamos en buen camino. Me comenzaría a preocupar si la derecha no reacciona cuando identificamos a los enemigos políticos internos y externos de los pueblos”, tuiteó.
La influencia del expresidente boliviano en el nuevo gobierno neomarxista peruano quedó evidenciada incluso antes de que Castillo jurara el cargo de presidente el pasado 28 de julio. Ha sostenido reuniones previas a la investidura del mandatario peruano con Vladimir Cerrón, secretario general del partido Perú Libre y “asesor en la sombra” del Poder Ejecutivo.
Además, participó en un evento de cocaleros junto al congresista Guillermo Bermejo -acusado por pertenencia y afiliación a los remanentes terroristas de Sendero Luminoso que operan en zonas controladas por el narcotráfico-, criticando la presencia de bases militares estadounidenses, asegurando que la instalación de estas causa el crecimiento del narcotráfico en los países afectados y vulneran su soberanía.
“So pretexto de la lucha contra narcotráfico, [instalan] bases militares. ¿Y para qué? Para tener el control del estado nacional y el pueblo. Para robar nuestros recursos naturales, eso lo que vivimos en Bolivia”, dijo Morales, quien además anunció que impulsará el Consejo Andino de la Coca “para hacer la revolución democrática en Perú”.
Runasur, otra quimera para fragmentar Hispanoamérica
Runasur, conjugación del vocablo quechua runa, que significa persona o ser humano, con Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), ha sido definido por su principal impulsor, Evo Morales, como un “mecanismo de integración plurinacional entre los pueblos indígenas, afrodescendientes, organizaciones sociales, sindicales, territoriales y movimientos sociales de la región”.
Aunque este foro ha terminado por definirse a finales de abril de este año, su origen se remonta al “Encuentro de los Pueblos y Organizaciones del Abya Yala hacia la construcción de una América Plurinacional”, realizado entre el 18 y 19 de diciembre de 2020 en la localidad de San Benito, en el departamento de Cochabamba, Bolivia, y que contó con la participación de al menos 1000 invitados internacionales.
De acuerdo con Telesur, en el encuentro se discutieron acciones para reimpulsar el proyecto de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), así como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) y la Unasur.
Por su parte, Evo Morales manifestó que “los pueblos originarios y las organizaciones del Abya Yala proponemos asambleas constituyentes para Estados Plurinacionales que expresen la diversidad de las identidades culturales, la convivencia armónica con la Madre Tierra y la reconstitución de la sabiduría ancestral”.
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