Por Mamela Fiallo Flor – Panampost.com
Luego del escarnio mundial al que fueron sometidos líderes como Donald Trump y Jair Bolsonaro por recomendar la hidroxicloroquina para pacientes con COVID-19, finalmente un estudio reveló que el uso de este compuesto puede aumentar en más del doble la supervivencia en casos de pacientes entubados.
De acuerdo con los registros documentados, cada dosis de hidroxicloroquina aplicada en los pacientes objeto del estudio, disminuía la mortalidad en 1,12 veces, mientras que con una dosis de 3 gramos la disminución de la mortalidad era de 2,5 veces.
Cuando se combinaba con azitromicina (AZM), los beneficios resultaban ser más significativos. La probabilidad de sobrevivir aumentaba. Alrededor de la mitad de las personas sobrevivían cuando se les suministraba 3 gramos de hidroxicloroquina (HCQ) junto a 1 gramo de AZM, mientras que tomando solo uno de los medicamentos la probabilidad de sobrevivir era de 16 %, es decir, 1 de cada 7 pacientes.
El estudio fue difundido por MedRxiv, una plataforma que disemina publicaciones médicas digitales. La rigurosidad de MedRxiv está respaldada por la solidez de su equipo. Cuenta con integrantes de la Universidad de Yale, miembros de Cold Spring Harbor Laboratory (CSHL) y la dupla femenina Theodora Bloom y Claire Rawlinson de The BMJ (la editorial médica).
“Me rompe el corazón que cientos, quizás miles, de pacientes en Nueva York fueron abandonados en sus casas en la primavera de 2020 hasta que se quedaban sin respiración y luego eran hospitalizados e intubados con respiradores artificiales y se les negaba el acceso a la hidroxicloroquina”, comenta en la página un usuario desde Texas.
El estudio observacional que se llevó a cabo en el Saint Barnabas Medical Center, Nueva Jersey, analizó a 255 pacientes con COVID-19 que requerían ventilación mecánica invasiva (VMI) durante los dos primeros meses de la pandemia en Estados Unidos. Se trató de un subconjunto de pacientes en estado crítico, de los cuales poco más de 1 % había sido diagnosticado clínicamente con COVID-19.
A través de una evaluación longitudinal integral y una nueva consideración de todos los datos, los expertos descubrieron y comprendieron mejor los factores que afectan el resultado después de la intubación.
Los científicos recopilaron y organizaron todos los signos vitales, valores de laboratorio y administraciones de medicamentos (hora, fecha, dosis y vía). Además, un especialista revisó los registros médicos anteriores de cada paciente.
Luego de los primeros 90 días, el 78,2 % de los pacientes falleció. Las condiciones preexistentes son el peor agravante en los pacientes con COVID-19. En este grupo las más comunes fueron hipertensión (63,5 %), diabetes (59,2 %) y obesidad (50,4 %). La edad y el sobrepeso también aumentaban la probabilidad de riesgo. El rango de peso de la cohorte fue casi 7 veces mayor. El modelo causal estableció que la terapia con HCQ y AZM ajustada al peso mejoraba la supervivencia en más de 100 %.
Trump y Bolsonaro tomaron hidroxicloroquina con resultados favorables
Contrario a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los presidentes de Brasil y Estados Unidos, Jair Bolsonaro y Donald Trump, para el momento del contagio, tomaron hidroxicloroquina como parte de su tratamiento contra el COVID-19. Ambos superaron el virus y aseguraron que la hidroxicloroquina tuvo un efecto significativo en su recuperación.
Pero la OMS desestimó y desmotivó el uso de la hidroxicloroquina, negando que pacientes interesados en este tratamiento pusieran a prueba sus efectos.
Científicos y médicos que se animaron a experimentar con este compuesto, a pesar del dictamen de la OMS, aseguran haber ayudado a sus pacientes con el polémico fármaco.
Ignorar a la OMS salvó vidas en una localidad italiana
Acatar las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud le ha quitado soberanía a las naciones (y regiones). El caso de Italia fue el más evidente. Cuando la zona cero estaba ubicada en Europa, Italia fue el país con más muertes reportadas; salvo en la región del Véneto.
«Véneto está controlando el coronavirus por no seguir a la OMS», aseguró Sergio Romagnani, profesor emérito de la Universidad de Florencia, en entrevista con El Confidencial de España, donde fue descrito como una eminencia en el campo de la inmunología y medicina interna.
Ignorar el mandato del Gobierno central ha permitido que en Véneto se salven vidas. La región pertenece a la Liga Norte, una de las zonas más ricas del país, que rechaza la burocratización de Roma. Refutar esta forma de gobierno permitió que el gobernador de Véneto hiciera las cosas a su manera. Recibió asesoría de expertos, no de burócratas, ni las órdenes del Gobierno central, ni el mandato de la OMS.
Por ejemplo, las pruebas tempranas permitieron aislar a las personas contagiadas, incluso a las asintomáticas, en lugar de encerrar a toda la población. Así lograron frenar la epidemia en seco. Descubrieron que entre el 50 % y el 70 % de los infectados menores a 50 años no desarrollaron síntomas.
Le costó menos vidas a la región y también menos dinero. Pues las pruebas son infinitamente menos costosas que las internaciones.
Politizar el virus ha sido otro obstáculo
La politización del virus también ha incidido en la forma en que se combate. Actualmente, cuando se pulsa clic en el subtítulo de «hidroxicloroquina» en el sitio web de la OMS, no conduce a ningún lado.
Sin embargo, desde Google sí aparece que según la OMS: «Los datos actuales muestran que no reduce las muertes en los pacientes hospitalizados con COVID-19 ni ayuda a personas con enfermedad moderada».
La última actualización fue del 5 de mayo, por lo cual aún no se estaría tomando en cuenta el informe citado por MedRxiv. Es posible que el organismo lo tenga bajo evaluación.
El eurodiputado de Vox, Hermann Tertsch, vicepresidente del grupo político de los Conversadores y Reformistas Europeos (ECR) en el Parlamento Europeo, a cargo de la delegación para Latinoamérica, aseguró que por animosidad contra Trump se le negó al mundo un tratamiento que pudo haber salvado muchas vidas.