Fuente: KontraInfo.com
La International Planned Parenthood Federation, principal lobby abortista global, con sede en Londres, financió en la Argentina un sitio web destinado a armar una “lista negra” de periodistas, políticos, militantes, twitteros, “influencers jóvenes”, líderes religiosos, legisladores y organizaciones que se oponen o han sido críticos con su agenda legislativa y cultural en el país. El espacio de internet está a cargo de la humorista fundadora de “Revista Barcelona”, Ingrid Beck, y los “periodistas” Juan Elman, Florencia Alcaraz, Paula Hernández y Paula Rodríguez.
Con un estilo propio del totalitarismo de pasados dictatoriales (algo que no sorprende dado el fundamentalismo propio de estos personajes), el sitio web plantea “Aquí se pueden encontrar personas y organizaciones y sus relaciones identificables con la reacción conservadora. La búsqueda puede hacerse a partir de distintos filtros: por actividad (redes sociales, partidos políticos, iglesias, medios, poderes del Estado, think tanks, organizaciones de la sociedad civil, entre otros), territorio, o individualmente por nombre. Al cliquear en cada foto, aparece la biografía correspondiente y su red de vínculos”.
Desde hace ya varios años, Kontrainfo ha denunciado, con documentación probatoria, el vínculo de la multinacional del aborto, Planned Parenthood con ONG’s, agrupaciones políticas y periodistas en la Argentina (como lo viene haciendo en buena parte del mundo), destinando a las mismas varios millones de dólares, generando así un fuerte lobby en los medios de comunicación, organizaciones partidarias, sindicales y en el propio Congreso de la Nación, como forma de asegurarse la sanción de leyes afines a su agenda.
Sin embargo, el aporte dinerario solía ser negado por los distintos actores en juego. Debe reconocerse que en esta ocasión, la financiación ha sido completamente explícita, mostrando al titiritero ya sin pudor. Así lo relató la humorista en sus redes sociales:
Los empleados de la Planned Parenthood detrás del “sitio de escraches”:
Ingrid Bekinschtein (Ingrid Beck), fue fundadora en 2003 de “Revista Barcelona” y es autora de libros como “Queríamos tanto a Olmedo”, “Boludeo’s” y “Guía inútil para madres primerizas”. Junto a Soledad Vallejos, periodista de los diarios Página/12 y La Nación, solicitaron en el INPI la titularidad de la “marca” #NiUnaMenos. María Florencia Alcaraz co-dirige el portal de noticias feminista LATFEM y forma parte de la “Red Internacional de Periodistas con Visión de Género en Argentina” (RIPVG – AR). Condujo el programa “La Olla” y participó en el programa radial Navarro 2019 en El Destape Radio entre 2018 y 2019. Ha colaborado también en medios digitales auspiciados por la Open Society Foundations, de George Soros, como “Cosecha Roja” y “Revista Anfibia”. Juan Elman escribe como periodista en medios del poder económico de la Argentina, como “Clarín”, así como en la ya mencionada “Revista Anfibia”. Paula Hernández trabaja desde hace 12 años en Radio Nacional Córdoba y Paula Rodríguez es miembro de Revista Barcelona y fue jefa de Redacción en la revista La Maga.
Tras darse a conocer el sitio web de escraches, llamativamente, el grupo de periodistas “cerró con candado” sus perfiles en la red social Twitter, de modo de evitar el repudio generalizado.
Es interesante destacar el rol que ONG’s e instituciones extranjeras, como International Planned Parenthood, Open Society o Amnesty Internacional, no elegidas democráticamente por nadie, han venido cumpliendo en los países subordinados a sus agendas, como la Argentina. Es difícil no encontrar leyes polémicas, y aún rechazadas popularmente de manera mayoritaria, que no hayan sido financiadas, directa o indirectamente, por las mismas. Sus agendas han logrado establecerse de manera hegemónica en los grandes medios de comunicación así como en academias y universidades. A diferencia de la Argentina, sería útil recordar que países como Rusia han puesto un freno a la injerencia extranjera de este tipo de entidades, con leyes que multan y permiten la expulsión de las mismas, ya que “suponen una amenaza para la capacidad de Defensa o la seguridad del Estado, o bien al orden público o la salud pública, con el fin de defender las bases del orden constitucional, la moral y los derechos e intereses legales de otras personas”.
La International Planned Parenthood Federation (IPPF), con sede en Londres, es la mayor red de clínicas de abortos en el mundo (46.000 clínicas, abarcando 152 países y realizando, según sus propias cifras, 5 millones de abortos al año). Solo esta entidad otorgó entre 2008 y 2016, la cantidad de U$S 5 millones de dólares a las principales organizaciones detrás de la campaña por la legalización del aborto en Argentina, al valor del dólar oficial a diciembre de 2020, unos $440 millones de pesos, información chequeable en sus propios informes financieros. El monto real es muy superior ya que hace 4 años que Planned Parenthood dejó de aportar esa información, a pesar de que incrementó sus ingresos y erogaciones mundiales. Pero la influencia de la multinacional del aborto no queda ahí: también elaboró los manuales en los que se basan los conceptos de las organizaciones, con el detalle de cómo expresar eufemísticamente cada tema para evitar generar rechazo de la población y sí por el contrario, cómo usar adjetivaciones para estigmatizar a quienes se oponen a su agenda. ¿Quién es el principal financista de este engendro multinacional? El gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña, el histórico enemigo de la Argentina y quien viene diseñando desde hace décadas la geopolítica en materia de población junto a las distintas estructuras del poder global.