Por Isa Cox – westernjournal.com
¿Te has cansado de la crisis fronteriza del presidente Biden?
¿Sientes que no podrías disgustarte más al oír hablar de niños abarrotados en jaulas, abandonados en el desierto, o simplemente arrojados desde el muro fronterizo mientras los demócratas que dirigen Washington D.C. fingen preocupación humanitaria?
Bueno, ya verás — la insensibilidad que rodea a la crisis fronteriza acaba de alcanzar un nivel completamente nuevo y, vaya, es aún más asombrosa de lo que podrías haber imaginado.
El New York Post informó el sábado que han surgido fotos de un libro para niños escrito por la vicepresidenta Kamala Harris que se incluye con las necesidades básicas en paquetes de bienvenida para los nuevos menores migrantes no acompañados mientras están bajo custodia federal dentro del Centro de Convenciones y Entretenimiento de Long Beach de California.
“Cuando hay un problema, los superhéroes siempre aparecen en el preciso momento”, asegura a los niños el libro titulado, “Los superhéroes están en todas partes”.
Sus lectores, por supuesto, deben tener la edad suficiente para leer y poder leer con fluidez en inglés, y al mismo tiempo ser lo suficientemente jóvenes para apreciar un libro ilustrado sobre superhéroes. Es probable que sea un nicho demográfico, dadas las circunstancias.
“Según los informes, los menores migrantes recibirán el libro para niños de la vicepresidenta Kamala Harris en kits de bienvenida en un nuevo refugio en Long Beach, CA. ‘Cuando hay un problema, los superhéroes siempre aparecen en el preciso momento’, les dice Harris a los niños en un libro, que se muestra encima de un catre con suministros más básicos”, escribió un usuario en Twitter.
“¡QUÉ TRISTE!”
Mientras tanto, la propia vicepresidenta no aparece por ninguna de esas instalaciones fronterizas, tampoco en las inmediaciones de la desastrosa crisis humanitaria creada por la propia administración Biden-Harris.
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Al tiempo que la vicepresidenta supuestamente se ha encargado de abordar la crisis que la Casa Blanca insiste no es en realidad una crisis, nos promete que se está centrando en las “causas fundamentales” del reciente aumento de cruces ilegales.
Aparentemente, ella tiene que resolver por sí sola décadas de corrupción y desestabilización en Centroamérica antes de poder estar disponible lo suficiente como para asegurarse de que los niños migrantes no estén metidos como sardinas dentro de instalaciones abarrotadas e infestadas de COVID-19, desnutridas o abusadas sexualmente.
Extrañamente, no escuchamos mucho de la administración sobre cuáles son estas causas fundamentales o cómo Harris, quien fue senadora júnior cuando fue elegida como compañera de fórmula del ahora presidente Joe Biden, incluso planea hacer tal hazaña al dirigirse a ellos.
Si bien estos detalles parecen demasiado frívolos para proporcionarlos al público estadounidense, aparentemente alguien ha decidido que sería un placer para los niños migrantes hojear el libro ilustrado en inglés de la vicepresidenta que ha roto el techo de cristal y otras barreras mientras esperan su procesamiento en el sistema.
Qué … ¿pensativo?
No estaba claro cómo se eligió el libro para incluirlo en los kits de bienvenida.
Según Fox News, un funcionario de la Casa Blanca, dijo que Harris no sabía que el libro se estaba distribuyendo a niños migrantes. El periódico Washington Examiner informó que el libro era “parte de un esfuerzo de donación de toda la ciudad para recolectar libros y juguetes para los niños”.
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No solo Harris no pudo ir a la frontera y ver a estos niños con sus propios ojos, y mucho menos celebrar una conferencia de prensa sobre cómo planea abordar esta no crisis, sino también a algunos niños migrantes entrantes se les están dando copias de un libro que ella escribió que la mayoría de los niños ni siquiera saben leer.
Y eso se suma al hecho de que todo el motivo de la afluencia masiva de menores no acompañados son las políticas equivocadas de la propia administración de Biden-Harris, que prácticamente invitan a los ciudadanos extranjeros a enviar a sus hijos solos al otro lado de la frontera.
¿Es esto realmente una ignorancia total — o pura insensibilidad? ¿Tiene la administración siquiera una pizca de preocupación por estos niños o la crisis que ha creado?