Traducido de greatgameindia.com por TierraPura.org
Los servicios de inteligencia rusos y bielorrusos han revelado oficialmente cómo impidieron la revolución de colores respaldada por la CIA y un intento de golpe militar para derrocar al gobierno bielorruso, así como el asesinato del propio presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko. Fue Lukashenko quien el año pasado sacó a la luz cómo el Banco Mundial obligó a los gobiernos soberanos a imponer estrictos bloqueos para la ayuda del coronavirus.
Poco después de llegar al poder, Alexander Lukashenko inició una campaña de represión contra la Fundación George Soros imponiéndole una multa de 3 millones de dólares por violación de divisas. Ese mismo año George Soros abandonó Bielorrusia.
Desde entonces, Bielorrusia ha sido objeto de constantes revoluciones de colores destinadas a derrocar a Lukashenko.
En febrero de este año, GreatGameIndia informó de cómo Alexander Lukashenko, el presidente de Bielorrusia, anunció su victoria sobre el golpe organizado por globalistas como George Soros para derrocarlo.
Sin embargo, los detalles de la operación no se hicieron públicos y solo ahora se están compartiendo con los medios de comunicación.
El FSB (Servicio General de Seguridad) ruso y los servicios de seguridad bielorrusos han revelado que el asesinato del presidente bielorruso fue autorizado por la CIA.
A principios de esta semana, varias figuras de la oposición bielorrusa fueron detenidas en su país y en la vecina Rusia.
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Varias personas, dos de ellas en Rusia, han sido detenidas por planear una insurrección armada contra el presidente bielorruso.
Las dos naciones aclararon que todos los detenidos son sospechosos de planear una insurrección armada contra el presidente Alexander Lukashenko, cuyo largo control del poder fue desafiado el año pasado por protestas masivas respaldadas por el extranjero.
El sábado se reveló la existencia de un complot para asesinar a Lukashenko, a otros altos cargos bielorrusos e incluso a sus familiares.
En Minsk (Capital de Bielorrusia), la emisora nacional ONT publicó un reportaje en el que se nombraba a los presuntos conspiradores y se exponían sus planes. El reportaje ofrecía como prueba varios clips de lo que parecen ser reuniones de Zoom entre ellos.
El FSB ruso dice que fue avisado por sus homólogos del KGB (Agencia de Seguridad, única agencia de inteligencia que mantiene esas siglas desde la Unión Soviética) bielorruso.
El plan discutido en la reunión, según describe el FSB, implicaba el asesinato de “casi toda la cúpula” de Bielorrusia, un golpe militar y un apagón de todo el país.
“Se sugirió que la fase activa sería lanzada por algunos grupos armados (‘partisanos’), que actualmente están estacionados en ‘bases secretas'”, informó el FSB.
Al parecer, la acción estaba programada para el 9 de mayo, fecha en la que Bielorrusia celebra un desfile militar dedicado a la victoria sobre la Alemania nazi en 1945.
La ONT difundió en su reportaje imágenes de cámara oculta de lo que parecía ser la reunión en Moscú.
El propio Lukashenko habló con los medios de comunicación para explicar cómo sus diversos oponentes estaban conspirando contra él y sus dos hijos.
El grupo que incluye a Zenkovich y Feduta era “definitivamente obra de la inteligencia extranjera”, afirmó, “muy probablemente la CIA o el FBI”.
Lukashenko afirmó que Zenkovich era un “agente estadounidense”. El abogado tiene doble nacionalidad estadounidense y belarusa y lleva más de una década viviendo en Estados Unidos.
El presidente confirmó que la detención a principios de esta semana de Grigory Kortusyov, líder del partido político de la oposición BNF (Partido del Frente Popular de Bielorrusia), formaba parte de la actuación contra la misma supuesta conspiración.
Zenkovich fue un miembro destacado del mismo partido y ocupó un cargo electo en un consejo local antes de emigrar a Estados Unidos.
Anteriormente, la operación de contrainteligencia rusa desbarató un intento similar en Rusia, en el que Alexei Navalny (abogado y político ruso) fue sorprendido colaborando con un agente del Mi6 británico para derrocar al presidente ruso Vladimir Putin.
Los servicios de inteligencia rusos y bielorrusos dieron detalles de toda la trama en un extenso comunicado de prensa.
El Servicio Federal de Seguridad de la Federación Rusa, junto con el Comité de Seguridad del Estado de la República de Bielorrusia, como resultado de una operación especial, reprimió las actividades ilegales de Yuri Leonidovich Zyankovich, que tiene doble nacionalidad de Estados Unidos y de la República de Bielorrusia, y de Alexander Iosifovich Feduta, ciudadano de la República de Bielorrusia, que planeaban llevar a cabo un golpe militar en Bielorrusia según un escenario elaborado de “revoluciones de color” con la participación de nacionalistas locales y ucranianos, así como la eliminación física del presidente A. Lukashenko.
Como informó GreatGameIndia, el año pasado, en una entrevista Lukashenko explicó la importancia geopolítica de Bielorrusia.
Aleksandr Lukashenko subrayó que Occidente necesita a Rusia, no a Bielorrusia, a la que considera solo un trampolín. “Las autoridades rusas entienden muy bien que no se puede entregar Bielorrusia a Estados Unidos, como se hizo con Ucrania. ¿Por qué no se puede hacer? Porque es un acuerdo sanitario de unos 1.000 km”, dijo el presidente.
Añadió que cuando se convirtió en el primer presidente de Bielorrusia, impidió los planes de crear dicho cordón sanitario de los Estados bálticos, Bielorrusia y Ucrania, que separaría a Rusia.
“Por eso los estadounidenses me odian, desde aquellos primeros años. No dejé que Soros viniera. Y tú eras amigo de él. Ni siquiera estoy hablando de Ucrania. Usted era amigo de él, de los que estaban cerca de Boris Nikolaevich [Yeltsin].
No mencionaré los nombres, usted los conoce. Todavía están ahí. Pregunte a Putin cuántos miembros de la CIA estaban en el gobierno y en el Kremlin”, dijo Aleksandr Lukashenko.
En este contexto, Lukashenko expuso cómo el Banco Mundial obligó a los gobiernos soberanos a imponer estrictos cierres para la ayuda al coronavirus.
Un intento similar se produjo en Tanzania. La Unión Europea dio 27 millones de euros a Tanzania para que impusiera las medidas contra el COVID-19 prescritas por la OMS, como cierres estrictos, máscaras y vacunación masiva.
Sin embargo, Tanzania aceptó el dinero y luego declaró al país libre de coronavirus. Esto llevó a los europeos a desahogarse en el Parlamento.
Al igual que Lukashenko, incluso el presidente tanzano puso en evidencia los protocolos fraudulentos de la OMS sobre el COVID-19 o correctamente llamado virus PCCh (Partido Comunista chino).
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Envió a la OMS muestras de una cabra, una papaya y una codorniz para que las analizaran y todas ellas dieron positivo en COVID-19.
Su repentina muerte ha suscitado muchas preguntas, entre ellas, si el presidente de Tanzania fue asesinado por sacar a la luz la plandemia de COVID-19 al tomar medidas controvertidas contra las grandes farmacéuticas y la OMS y su impulso global de las vacunas.
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