Traducido de thegatewaypundit.com por TierraPura.org
La noche del sábado 6 de marzo, en el Día de la Autonomía Nacional de ANTIFA, la sede de la Escuela Pública de Portland, Oregon, EE. UU., fue fuertemente vandalizada y varios vehículos del distrito escolar incendiados.
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Un camión de reparto de alimentos del distrito quedó completamente calcinado en las afueras.
Los vehículos de Bomberos y Rescate de Portland llegaron después de las 3 de la mañana del sábado al domingo, donde encontraron dos furgonetas de carga y un gran camión de caja en llamas en un aparcamiento.
Esto está siendo descrito como “un ataque a nuestros sistemas escolares”.
El Frente de Liberación de la Juventud de Eugene, una organización radical de extrema izquierda responsable de organizar acciones directas en el pasado, comentó públicamente el ataque.
En el pasado, ANTIFA ha derribado estatuas, atacado edificios federales, matado a tiros a transeúntes inocentes, “molotov” a la policía, quemado biblias, y ahora, como se predijo, están apuntando al sistema escolar.
Mientras tanto, el director del FBI, Chris Wray, se niega a designar a ANTIFA como una organización terrorista doméstica, o simplemente a reconocer su existencia.
Los partidarios de Trump están siendo perseguidos, desacreditados, puestos en listas para ser atacados violentamente y asesinados por sus opiniones.
ANTIFA quema, saquea y destruye sin ninguna consecuencia.
La ley y el orden han dejado de existir en la distopía americana de Joe Bidens. El personal militar y los oficiales de policía están siendo investigados y retirados de los detalles de seguridad por el simple hecho de tener puntos de vista políticos diferentes.
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Estados Unidos está experimentando una verdadera insurrección, pero está siendo orquestada por funcionarios electos y terroristas domésticos de extrema izquierda a sueldo.