Si quieres ver cómo será el futuro bajo el Gran Reseteo impulsado por Biden y la élite de Davos, sólo tienes que ver lo que está sucediendo en Texas en este momento. Como una fuerte tormenta de invierno trae temperaturas bajo cero, con nieve y hielo en la mayor parte del estado, con escasez masiva de electricidad y causando dificultades incalculables y la muerte. Más de 4 millones de personas se han quedado sin electricidad y ya se han producido varias muertes debido a la escasez. Los ganaderos, lecheros y avicultores del estado se enfrentan a un desastre cada vez mayor cuanto más tiempo estén sin electricidad. Lo que realmente está sucediendo es que los efectos combinados de la economía neoliberal, de la desregulación de los mercados de la energía, combinados con las políticas verdes y el movimiento hacia la energía sostenible, han llevado a la congelación del sistema de transmisión. Y como resultado, cuatro millones de personas en Texas se quedaron sin electricidad, y millones de personas en México que estaban conectados a la red de Texas también se quedaron sin electricidad, aunque para la mayoría de estos el servicio se restableció con rapidez. Es de esperarse que en algún momento se culpe a Rusia de todo esto (aunque sea a nivel psicológico), y el Washington Post ya lo insinuó así al decir que todo esto se debe a un frente frío que llegó directamente del Polo Norte a través de Siberia. Pero el hecho es que esto es un mal autoinfligido.

Por Bruce Director y Harley Schlanger

Los apagones en Texas demuestran que el ‘Nuevo Trato’ verde puede matarte

El hecho es que esto es autoinfligido. Es el resultado de años de tolerancia de la falsa ciencia del ecologismo que nos ha convencido de que tenemos que alejarnos de los sistemas de mayor densidad de flujo energético como el carbón, el gas, el petróleo y la energía nuclear, y en su lugar volver a la edad media con la energía solar y eólica.

¿Qué causa el cambio climático? El Sol, el Sistema Solar y la Galaxia, ¡no el CO2 ni los seres humanos!

Lo que estamos viendo es la pérdida de electricidad que también afecta a cosas como el refinado de petróleo, y así estamos viendo una caída significativa en la producción de petróleo, la perforación de petróleo, el refinado de petróleo, los precios se disparan, y 14,7 millones de personas en México que estaban conectadas a la red de Texas también se quedaron sin electricidad, aunque para la mayoría de ellos se restableció con bastante rapidez.

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El 23% de la electricidad que se utiliza en Texas procede ahora de la energía eólica. La visión tradicional de Texas es la de los pozos petrolíferos de J.R. Ewing, la de tallar la civilización a partir del desierto. Esto era algo que producía mucha riqueza, mucha producción de bienes físicos. La industria del petróleo alimenta la economía de muchas maneras, incluyendo la maquinaria, la tecnología científica, etc. Pero cuando se empieza a pasar a la energía eólica, ¿cuál es el efecto? Bueno, vemos el hecho de que las llamadas fuentes sostenibles no son eficientes, no son fiables, y son más costosas —requieren subvenciones. Y así, con el 23 por ciento de la electricidad en Texas procedente de la energía eólica, lo que sucedió ayer es que las turbinas eólicas se congelaron en el hielo recogido en las turbinas y no pudieron trabajar.

Las mentiras escupidas por los medios de comunicación de masas al respecto son realmente increíbles. El Washington Post por ejemplo pecó por omisión al decir que “el consumo de electricidad de los texanos y sus necesidades de consumo han superado con creces la potencia actual de generación.”

Las políticas radicales de “libre mercado” y la ideología verde están matando a la gente en Texas

¿Qué tienen en común California y Texas? Ambos estados, a pesar de muchas diferencias aparentes, han adoptado las llamadas políticas de libre mercado para desregular la producción y distribución de energía, que favorecen a los estafadores especuladores del sector privado por encima de la necesidad pública de energía barata, eficiente y fiable. Ambos estados también se volvieron “verdes”, cerrando las plantas de carbón y nucleares, en favor de los ineficientes molinos de viento y parques solares. Por eso California tuvo apagones el verano pasado, y los tejanos se están congelando en la oscuridad ahora mismo. Esto es un anticipo de lo que el Great Reset y el Green New Deal de Davos están poniendo en marcha para el resto del país y las naciones de la Unión Europea, si no nos movilizamos para rechazar esta idiotez antihumana.

Texas congelado por la locura de Biden y Wall Street

La Organización LaRouche ya venía advirtiendo que esto sucedería.

¿Cómo es posible que una de las regiones más productivas del mundo en materia de energía se encuentre sin la capacidad de producir suficiente electricidad? La respuesta es doble. Texas se vio abocada a la energía solar y eólica por las políticas de Wall Street y del gobierno estadounidense para promover la energía “verde”. A pesar de ser un gran productor de petróleo y gas natural, y de contar con dos grandes centrales nucleares, Texas redujo su uso de estas fuentes de energía fiables y ahora depende de la energía eólica para el 25% de su producción de electricidad y otro tanto de la solar. Ahora los molinos de viento están congelados y los parques solares están cubiertos de nieve. Estas fuentes no sólo son poco fiables, sino que no son, no fueron y nunca serán económicas. El impulso de estas fuentes de energía “alternativas” es una estafa financiera alimentada por las subvenciones del gobierno y la especulación de Wall Street.

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Pero antes de que digan que dejen que el libre mercado decida qué fuentes de energía deben desarrollarse, miren la otra causa de la debacle de Texas: la desregulación. Comenzando bajo la administración Clinton y acelerando bajo George Bush y Obama, Wall Street, con el respaldo del gobierno federal y estatal, impulsó la desregulación de la energía, en particular de la energía eléctrica. ¿Recuerdan a Enron? En lugar de ver la producción de energía, especialmente la eléctrica, como vital para el funcionamiento de la economía, Wall Street la vio como un pretexto para generar instrumentos financieros especulativos. Esta financiarización completamente inútil redirigió la inversión desde las mejoras en la producción y la fiabilidad de la infraestructura de producción de electricidad, incluidas las redes eléctricas, hacia los mercados financieros de Nueva York, Londres y otros lugares.

Las condiciones para este doble golpe de idiotez se establecieron con el colapso del sistema de Bretton Woods en 1971, que dio paso a la adopción simultánea de la idea maltusiana del crecimiento cero y la desregulación del libre comercio. Lo que entonces parecía un extremismo radical, hoy se ha convertido en el dogma dominante tanto de la izquierda como de la derecha.

A menos que quieras que el futuro se parezca a Texas esta semana, únete a la lucha de LaRouche PAC para devolver a Estados Unidos al sistema de crédito y producción establecido por Alexander Hamilton y modernizado por Lyndon LaRouche.

Fuente: mentealternativa.com

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