Traducido de News Pushed por Tierrapura.org
Un agente demócrata anónimo, se presentó para denunciar la historia interna del fraude electoral que ha cometido durante años.
Un reportaje exclusivo, de Jon Levine del New York Post, brindó detalles sobre la espantosa cantidad de fraude electoral que han estado cometiendo los demócratas.
Levine habló con un hombre que dirigió un equipo de estafadores, cuya especialidad era manipular elecciones a través de varios métodos.
El informante anónimo cree que los planes que ha perpetrado, se utilizarán en masa en las próximas elecciones locales, estatales, congresuales y presidenciales en el mes de noviembre.
«No hay elecciones en Nueva Jersey, desde el Consejo de la Ciudad hasta el Senado de los Estados Unidos, en la que no hayamos trabajado. Trabajé en una elección para el comisionado de bomberos en el condado de Burlington», dijo el operario.
«Cuanto más pequeña es la elección, más fácil es hacerla».
Mencionó que su operación normalmente solo se ocupa de las elecciones en Nueva York, Nueva Jersey y Pensilvania, pero dice que estas operaciones ocurren ampliamente en todo Estados Unidos.
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Cómo se hace
Una historia interna implicaba fotocopiar votos reales, y usarlos para reemplazar los votos de los votantes reales.
Los estafadores fueron de puerta en puerta convenciendo a la gente, de que les dejara devolver sus boletas por ellos, luego abrieron los sobres con vapor y reemplazaron las boletas con las suyas.
Otro esquema implicaba convencer a un cartero anti-Trump de que simplemente tirara las boletas republicanas.
«Tienes un cartero que es un rabioso anti-Trump y está trabajando en Bedminster o en algún bastión republicano», dijo el agente anónimo.
«Puede tomar esas boletas, y sabiendo que el 95% van a llegar un republicano, puede simplemente tirarlas a la basura».
Los datos de las elecciones federales, muestran que alrededor de 28,4 millones de votos por correo han desaparecido desde 2012.
La fuente también habló de convencer a los empleados de los asilos de ancianos, para que llenen las boletas de aquellos que están a su cuidado.
En los lugares donde no hay leyes de identificación de votantes, su equipo encuentra a los votantes registrados, que no son votantes activos y se hace pasar por ellos al conocer su información personal.
Incluso pagan a los sin techo entre 50 y 60 dólares por cada uno, para que voten por los demócratas.
Estos esquemas hacen aún más evidente que los medios de comunicación principales mienten sobre la seguridad de la votación principal.
A pesar de sus constantes gritos de que el presidente Trump está engañando a los votantes acerca de la seguridad de la votación por correo, la creciente evidencia sugiere que el presidente Trump tiene razón.
