La medida fue aprobada esta semana por el Gobierno de la Ciudad de México, y tiene como objetivo autorizar en el Registro Civil el cambio de nombre a menores trans, en un afán de imponer la ideología de género en los niños.
En plena crisis económica, pandemia y profundización de la inseguridad, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, informó que el Gobierno de la Ciudad, a través de un Consejo, ha autorizado el cambio de nombre y de sexo a niños trans, con autorización de sus padres o tutores.
Durante la presentación de la Clínica de Atención Integral de Personas Trans, Sheinbaum explicó que la medida se tomó luego de que varias familias tramitaran un amparo en contra del Registro Civil, por negarles el cambio de nombre a menores de edad.
Asimismo, la Jefa de Gobierno informó que el próximo lunes enviará una circular donde se indica que por ningún motivo se pueden establecer restricciones para los “trámites que realizan familias homoparentales y lesboparentales” en el Registro Civil.
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También, se instalará un Consejo integrado por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM) y el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación (COPRED), para analizar casos de la comunidad “LGBT+”.
“Quiero decirles que estaremos instalando, más allá de la ley que se vaya a aprobar en el Congreso, un Consejo del Gobierno de la Ciudad de México, en donde a partir de este Consejo interinstitucional, se va a permitir de acuerdo a las condiciones, y se va a revisar cada uno de los casos, para que se pueda permitir en los casos particularmente que están en amparo, este cambio en el Registro Civil sin necesidad de que continúen con sus amparos”, declaró Sheinbaum.
Además, demostrando el altísimo nivel de progresismo que se maneja en las grandes ciudades del país latinoamericano, la Jefa de Gobierno destacó que ha sido muy importante el reconocimiento en la Ciudad de México del matrimonio de personas del mismo sexo, de la adopción, y alentó el trabajo para que “los estereotipos, los prejuicios, queden a un lado y realmente pueda todo la persona que vive en la ciudad, o que visita la ciudad, sea libre y que tenga las libertades que le da el marco de los derechos humanos en la ciudad”.
También afirmó que su gobierno tiene la convicción de que se respete la decisión, tomada dentro de las familias, de que “niños y niñas trans cambien su nombre pues tienen el derecho a hacerlo”.
“Si los padres están de acuerdo y tienen la convicción de que finalmente las familias sean diversas, y esa es una esencia de los derechos en la ciudad, el Estado no tendría que impedírselos”.
Diversos sectores han criticado la medida, considerada como una maniobra de la izquierda para promover la ideología de género en el país.
El diputado del PAN en la Ciudad de México, Diego Garrido López, condenó la pretensión de la jefa de Gobierno de implementar mecanismos para el cambio de administrativo de sexo de niños y niñas, porque además de revivir la discusión de la ley de infancias transexuales, carece de facultades y atribuciones para actuar al respecto, además de que no existe ninguna ley en la Capital en la que se disponga la creación del Consejo anunciado.
Garrido López agregó que además de pasar sobre el poder judicial, Sheinbaum también está haciendo a un lado al poder legislativo, pues el Congreso de la Ciudad es el único facultado para emitir en todo caso una legislación al respecto.
Asimismo, el legislador panista condenó el uso político de la infancia que hace el gobierno, pues “por un lado promueve la prohibición por ley de venta de dulces a menores, y por el otro pretende permitirles una medida extrema como cambiar de sexo”.
La Plataforma Conciencia y Particiación (ConParticipación), una organización ciudadana que promueve el respeto de la vida humana en todas sus etapas, se ha mostrado preocupada ante esta iniciativa.
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El director de la organización, Marcial Padilla, declaró ante un medio de comunicación que los anuncios de Sheinbaum demuestran un compromiso en contra de la infancia y de imposición de una agenda ideológica.
A su vez ha hecho un llamado a alzar la voz y lograr frenar los disparates del Gobierno progresista de Ciudad de México.
“La jefa de gobierno de Ciudad de México no está a favor de los niños con confusión sexual, está imponiendo la confusión sexual a cualquier niño que, a partir de ahora, podría ver el cambio de sexo como un cambio de ropa”, aseguró Padilla.
Mientras se acumulan las denuncias de que por ejemplo los niños con cáncer carecen de una clínica adecuada y de medicamentos suficientes para tratar su enfermedad en la Ciudad de México, el gobierno progresista impulsa una agenda claramente ideológica, pasando por encima de las instituciones, y violando las leyes, olvidándose de sectores que en realidad necesitan un apoyo urgente en momentos de crisis y angustia.
Fuente: La Derecha Diario
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