Por Mamela Fiallo Flor
Las redes de pedofilia han sido uno de los tantos escándalos que han pasado a un plano menor en medio de la pandemia del coronavirus (COVID-19), los disturbios en las calles y las inminentes elecciones en Estados Unidos. Pero un reciente hallazgo puso el tema en el mapa nuevamente.
En Georgia, 39 niños desaparecidos fueron encontrados luego de una operación exitosa de dos semanas. La investigación fue realizada por diversos grupos y agencias: la Unidad de Menores del Cuerpo de Alguaciles de los Estados Unidos (USMS), el Grupo de Trabajo Regional para Fugitivos del Sureste, agencias estatales y locales en Georgia y el Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados (NCMEC), una organización sin fines de lucro.
La misión se llamó «Operation Not Forgotten», «Operación No Olvidado» en su traducción al español, que «permitió el rescate de 26 niños desaparecidos y la ubicación segura de otros 13», tal y como señala el medio CBS News.
«El Servicio de Alguaciles de EE. UU. está totalmente comprometido a ayudar a las agencias federales, estatales y locales a localizar y recuperar niños desaparecidos en peligro, además de su misión principal de detención de fugitivos», espetó el director del Servicio de Alguaciles, Donald Washington, que añadió, «el mensaje para los niños desaparecidos y sus familias es que nunca dejaremos de buscarlos».
La agencia explicó que los niños rescatados se encontraban en una situación vulnerable de alto riesgo. «Estos niños desaparecidos fueron considerados algunos de los casos de recuperación más desafiantes y de mayor riesgo en el área, con base en indicios de factores de alto riesgo como la victimización por tráfico sexual infantil, explotación infantil, abuso sexual, abuso físico y servicios médicos o condiciones de salud mental», dice el comunicado de prensa del Cuerpo de Alguaciles de los Estados Unidos.
La nota de prensa continúa explicando que fueron arrestadas nueve personas de la asociación criminal. Además, la agencia presentó 26 órdenes de arresto y añadió cargos adicionales por presuntos delitos relacionados con tráfico sexual, secuestro por parte de los padres, violaciones registradas de delincuentes sexuales, posesión de drogas y armas e interferencia en la custodia».
Los datos
Según explicó la propia agencia en el comunicado, en el 2019 el Cuerpo de Alguaciles ayudó «a recuperar a 295 niños desaparecidos basándose en solicitudes de asistencia de las fuerzas del orden», además, contribuyó a la recuperación de niños desaparecidos en el 75 % de los casos recibidos. Según detalló la Unidad de Menores del Cuerpo de Alguaciles de los Estados Unidos, el 66 por ciento de los niños desaparecidos se recuperó dentro de los siete días posteriores a la asistencia de la agencia en el caso. También resaltó que desde que comenzó la asociación con el Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados en 2005, la agencia ha recuperado a más de 1 800 niños desaparecidos.
Denuncias de políticos involucrados en redes de abuso de menores
Con la captura de Jeffrey Epstein, el magnate que volaba a su isla privada con figuras de la farándula y la política internacional, se aspiraba destapar estas redes. Pero Epstein murió abruptamente en prisión.
Sin embargo, la «madame» de Epstein, Ghislaine Maxwell, actualmente está bajo investigación. Durante el interrogatorio, una presunta víctima de Epstein, Virginia Giuffre (Roberts), confirmó la presencia del expresidente Bill Clinton en la isla y contó que cuando le preguntó a Epstein qué hacía allí el presidente de la nación, le respondió que Clinton le debía favores.
Pero nunca dijo qué favores eran. «Hace mucho tiempo que me dijo que todos le deben favores. Están todos en el bolsillo del otro», concluyó. En los documentos dice que el expresidente de Estados Unidos visitó la isla privada del magnate en el Caribe, conocida como la «isla de las orgías».
#MeToo no aboga por menores abusados
En el marco de la campaña mediática #MeToo, protagonizada por actrices de Hollywood reclamando por los favores sexuales exigidos a cambio de roles protagónicos, sobre todo por parte del productor Harvey Weinstein, no hubo visibilidad de abusos contra menores.
De hecho, #MeToo hizo un alto en medio de la campaña electoral. Cuando el candidato demócrata, Joe Biden, fue culpado de acoso sexual por la mujer que fue su secretaria cuando él era senador —antes de ser el vicepresidente de Barack Obama— las fundadoras de la campaña #MeToo afirmaron su solidaridad por la víctima pero manifestaron que su principal objetivo era derrotar al presidente Donald Trump.
Hollywood y la pedofilia
Los fines políticos de la agrupación no son lo único dudoso, sino su complicidad en el abuso de menores. Asia Argento, una de las líderes del movimiento #MeeToo fue acusada de abusar sexualmente de Jimmy Bennet cuando este tenía 17 años y ella 37, en el estado de California donde la edad de consentimiento es 18 años. Sumado al presunto delito, el abusado dice que Argento compró su silencio por 380 000 dólares.
Esta campaña en ningún momento sirvió para revelar el abuso contra menores, solo como megáfono para la agenda feminista. Desde la década de los 80 actores infantiles como Corey Feldman han denunciado el abuso sistemático contra niños (particularmente varones) en Hollywood, incluso afirma que hay círculos que se dedican a ello, pero sus súplicas no han sido escuchadas.
«El nombre que es más peligroso, el que más me asusta, será como Harvey Weinstein de nuevo», dijo Feldman recientemente a NBC4 California.
Mediante redes sociales, Feldman ha increpado a las actrices que no defienden a los menores abusados diciendo «puede ser que ella no haya sido víctima de ellos, pues les gustaban los niños».
Feldman fue uno de los actores infantiles que protagonizó el éxito de taquilla Los niños perdidos, junto a su tocayo Corey Haim, donde varios compañeros de elenco denunciaron haber sido abusados sexualmente. Incluso Charlie Sheen (de la serie Dos Hombres y Medio), actor que padece de VIH, aparece dentro de la lista de los acusados de abusar a Haim (en el rodaje de la película Lucas).
En medio de la politización del abuso y la jerarquización de las víctimas por parte de la industria del cine, los niños liberados en Georgia muestran que, como dice el refrán popular, la justicia tarda, pero llega.
Fuente: panampost.com
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